La diversidad de opiniones es uno de los sostenes de la democracia y los opositores cubanos, aunque coinciden en muchos temas cardinales, tienen opiniones variadas sobre el presente y el futuro del país. Con esta serie de pequeñas entrevistas que publicaremos durante la actual semana, CubaNet pone a la consideración de sus lectores los criterios de algunos opositores pacíficos cubanos acerca de lo acontecido en el país en 2011 y lo que esperan para 2012
Elizardo Sánchez Santacruz, ex-preso político, es una de las figuras más prominentes de la oposición cubana. Dirige la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional y es uno de los fundadores de la Corriente Socialista Democrática. Sánchez recibió el Premio Internacional de Derechos Humanos de la República de Francia en 1996.
CubaNet: ¿Considera relevantes las medidas tomadas por el gobierno cubano en 2011? ¿Qué puede esperar la población para el presente año?
Sánchez: El gobierno de los Castro (porque el hermano mayor sigue al bate), no ha introducido ninguna reforma en Cuba, sino cambios de poco calado, muy limitados y tardíos, emitiendo falsas señales de cambio para confundir a la opinión pública nacional e internacional. Lo que ha sido contrario a las expectativas que se levantaron en torno a la posibilidad de cambios verdaderos. Creo que esto es consistente con algo en lo que personalmente creo: los hermanos Castro nunca van a hacer reformas en nuestro país. Las medidas introducidas están encaminadas a tratar de aliviar la situación y comprar tiempo, algo que están haciendo constantemente para esquivar la necesidad de realizar verdaderas reformas. En esto se incluye el indulto dictado recientemente, que no ha favorecido ni al 4 por ciento de la población penal de Cuba, que estimamos entre 70 y 80 mil prisioneros. Creo que este escenario lo vamos a tener en 2012. A menos que ocurra un milagro, la situación de derechos civiles, políticos, económicos y culturales de la ciudadanía va a empeorar, y los niveles de represión política también van a aumentar, aunque es probable que haya alguna disminución de cara a la visita del Papa Benedicto XVI. Quisiera equivocarme, pero mi visión del futuro inmediato es escéptica, porque el gobierno se niega a comprender que las reformas son necesarias, y que la forma totalitaria de gobierno que copiaron algún día no tiene ninguna viabilidad, como no la tuvo en Europa Central y Oriental en el pasado.
CubaNet: ¿Cambiará en algo esta situación con la visita del Papa?
Sánchez: Como ciudadano cubano, me regocijo de la visita de Benedicto XVI a Cuba el próximo marzo. Se trata de un buen hombre, cuyas buenas intenciones están fuera de toda duda, no sólo en el caso de Cuba, sino en otras situaciones de conflictos, pero, y quisiera equivocarme, no creo que como resultado de su visita tengamos cambios significativos en lo que respecta a los derechos fundamentales de la persona humana. Es probable que con esta visita la Iglesia Católica y otras denominaciones religiosas vean aumentados sus espacios y posibilidades. Lo cual es algo positivo, pero la buena fe de la iglesia en cuanto al futuro del pueblo de Cuba, choca de manera dramática con la posición absolutamente inmovilista y continuista del régimen totalitario. Por lo tanto, no creo que tendremos resultados significativos, en términos de derechos de la ciudadanía, con esta visita; y mucho menos en cuanto al proceso inevitable y necesario de reconstrucción moral y material de nuestro hogar nacional.
ENTREVISTAS:
Los opositores tienen la palabra: Jorge Olivera
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Los opositores tienen la palabra: Manuel Cuesta Morúa
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Los opositores tienen la palabra: Martha Beatriz Roque
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