LA HABANA, Cuba.- La notable disminución de los ingresos por la venta de servicios médicos debido a la reducción de profesionales en Venezuela, a la cancelación del Programa Más Médicos en Brasil, país del que regresaron unos 4000 colaboradores en diciembre de 2018, así como el deterioro de los centros asistenciales a la población, la escasez de medicamentos y la necesidad de robustecer las instituciones para el turismo de salud, mueven al gobierno a acciones aperturistas hacia el extranjero, contradictorios con la cerrazón a la participación criolla.
Así entonces, para este 2019 se priorizarán los servicios médicos con la diversificación y la ampliación de los negocios internacionales, y el aseguramiento de su cobro, el incremento del turismo de salud en las instituciones cubanas, así como la concreción de servicios y procesos inversionistas con posibilidades reales de aporte al Plan de la Economía, expuso Rodrigo Malmierca Díaz, ministro del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, en el Consejo de Ministros a comienzos de febrero al chequear programas considerados esenciales, según informaron los medios oficiales.
Por otro lado, el Ministerio de Salud Pública ha identificado varios proyectos, todos en la fase de elaboración por las directivas de negociación, desde la aprobación de la Política de la Inversión Extranjera en 2013. Igualmente buscará nuevas oportunidades en otros países, que incluyan al sector privado, las alcaldías y las regiones, informó el ministro.
Alrededor de 55 mil colaboradores laboraban en 60 países en 2018. La mayoría se comercializan con un sistema donde el gobierno retiene un elevado por ciento del pago a sus profesionales y personal paramédico, quienes aceptan este método como única posibilidad permitida para contratarse en el extranjero y mejorar la calidad de vida propia y familiar, debido a los bajos salarios en la Isla, que no permiten cubrir adecuadamente los requerimientos de nutrición, vestimenta y distracción en Cuba, así como las carencias de vivienda y equipamiento indispensable para el hogar.
Entretanto, el gobierno cubano autorizó este 13 de febrero el retorno de los médicos que habían decidido permanecer en Brasil, después de que el gobierno de Díaz-Canel súbitamente ordenara la retirada de sus galenos del programa Más Médicos en diciembre de 2018, antes de que el presidente electo, Jair Bolsonaro, lo eliminara, como había anunciado durante su campaña electoral. Usualmente los “desertores” deben esperar años para poder regresar, y sus familias enfrentan muchas dificultades si desean unírseles en el exterior. Pero esta vez las autoridades de la Isla exhiben benevolencia ante su pueblo y la comunidad internacional.
El Ministerio de Salud Pública realizó la III Convención Internacional Cuba-Salud 2018, donde expuso “los éxitos y la vida científica del sector”, conjuntamente con la XIV Feria Comercial Salud para Todos, una bolsa para la comercialización de los servicios médicos de la Clínica Internacional Siboney, el Centro Internacional de Salud La Pradera, la Clínica Internacional Camilo Cienfuegos, la Clínica Central Cira García ̶ actualmente en ampliación ̶, y otros.
La ocasión sirvió para la realización del Primer Fórum de Inversión Extranjera, organizado por la Cámara de Comercio de Cuba, con el objetivo de potenciar las negociaciones de La Comercializadora de Servicios Médicos Cubanos S.A (CSMC S.A) y BioCubaFarma, y atraer a las empresas farmacéuticas y de biotecnologías, centros de salud, fondos de capital de riesgo, e investigación y desarrollo, informó Niuka Marsán, especialista de la Cámara.
La CSMC S.A realiza eventos nacionales y participa en las ferias de turismo por especialidades en el extranjero, con el fin de vender los servicios del personal de la salud en el exterior y la atención en los centros del país. Al respecto, la CSMC S.A publicó una amplia propagada promocional sobre el turismo de salud en la revista Excelencias Turísticas, No157/18, y en 2019 se redoblarán esos esfuerzos.
Hasta el presente, mayoritariamente en países árabes se comercializa la atención en hospitales con personal cubano, una modalidad distinta de pago a las existentes con Sudáfrica, Venezuela, Viet Nam, Bolivia y otros países, así como a través de los programas de la Organización Mundial de la Salud y disímiles instituciones.
A esto se suma que la producción de medicamentos en los años recientes ha sido insuficiente, debido a la carencia de financiamiento para adquirir materias primas, a pesar de que se han contratado con empresas chinas principalmente.
Durante una Mesa Redonda de la televisión cubana a finales de diciembre de 2018, junto al ministro de Salud Pública, doctor José Ángel Portal Miranda, el presidente de BioCubaFarma, doctor Eduardo Martínez Díaz, expuso que durante el 2018 se logró disminuir el faltante a un 40% y se continúa trabajando para minimizar la ausencia de productos. Una parte de los medicamentos es importada, lo que también se ha visto afectado por la insuficiente liquidez.
En diversas ocasiones Raúl Castro se quejó de la imposibilidad de avanzar en sus limitados cambios económicos por la mentalidad obsoleta y la burocracia. Varios ministros argumentaban dificultades para alcanzar los planes, cobrar las exportaciones y lograr inversiones extranjeras directas a causa de la incapacidad de los directivos a distintos niveles para adoptar decisiones, además del desconocimiento de los métodos de negociaciones internacionales. Igualmente, importante han sido los resultados de las auditorías realizadas por la Contraloría General de la República, partiendo de la inexistencia de contabilidad restituida en años recientes, y otros mecanismos económicos, que detectaron la falta de preparación técnica y el descontrol.
Esto ha propiciado delitos fomentados por el sistema de propiedad estatal y la planificación centralizada, aplicados mediante el control absoluto, que no ha controlado absolutamente nada.
La inmediata y voluntaria asistencia de la población ante la catástrofe ocasionada por un tornado en varios municipios de La Habana el pasado 27 de enero, ha demostrado que cuando los cubanos pueden aplicar sus energías e ingeniosidad sin trabas, recuperan la creatividad y eficiencia que hasta el presente solo han podido desplegar en el extranjero.
Sin embargo, cuando el gobierno de continuidad estableció los mecanismos burocráticos para la ayuda a los damnificados, chocó con la multiplicada tramitación y la inercia en la toma de decisiones por las mentes domadas en la espera de órdenes, autorizaciones, reglamentos, y papeleos. De manera que las circunstancias están demostrando la necesidad de disminuir la cadena de mando inflexible, a fin de mostrar eficiencia, que debería continuar después del referendo para aprobar la Constitución del Socialismo irrevocable, este 24 de febrero.