LA HABANA, Cuba.- Luego de publicarse en CubaNet mi artículo “Milagro en Motembo”, una periodista española del sitio sur.es que responde al nombre de Milagros López de Guereño, casualmente escribió un texto que parece una respuesta al mío.
En su artículo, Milagros López relata cómo casualmente, un mes después de que Raúl Castro admitiera que “producto de la situación venezolana se recibían menos barriles de petróleo, lo que ha ocasionado tensiones adicionales en el funcionamiento de la economía”, apareció una firma australiana, llamada MEO, que declara haber encontrado petróleo de buena calidad, y no el inservible por sulfuroso que acostumbradamente se halla en Cuba.
¿Casualidades y milagros bajo el castrismo? No lo creo.
Milagros López dice que el descubrimiento del petróleo salvador podría cambiar el futuro económico de Cuba, ya que acabaría con la dependencia del crudo venezolano.
Así, quedarían atrás los apagones, el racionamiento de la gasolina, las protestas por el caótico transporte público, las restricciones en el uso de los aires acondicionados, y un larguísimo etcétera.
¿Será esto un milagro o una promoción?
Milagros López cita a Peter Strickland, director de la milagrosa MEO: “Solo habrá que esperar a 2018, pero es esperanzadora la sola perspectiva de disponer de petróleo de calidad y no como la mayor parte del petróleo hasta ahora encontrado en la isla”.
Más optimismo, ni el que muestra el régimen con la muy seca Zona Económica del Golfo, conocida por las petroleras mundiales como “el cementerio de las ilusiones”.
Nos cuenta Milagros que esta compañía australiana estuvo negociando con el régimen cubano hasta septiembre de 2015, cuando firmó con CUPET el 100% de los derechos de exploración con un contrato de producción compartida. ¡Y casi tan milagrosamente como la concepción de la Virgen María, en solo nueve meses, anunciaron la buena nueva de que encontraron lo que por 80 años buscaron infructuosamente los gringos y los bolos.
Milagros López continúa alborozada y relata que los australianos, que al parecer creen en los milagros, apostaron por el bloque 9, entre los 59 existentes en esta ruleta.
Este bloque, casualmente, está cerca del yacimiento más grande en la isla, con un potencial de 11 000 millones de barriles del petróleo certificado, propiedad de la canadiense Sherrit International.
A pesar de que la MEO fue contundente, el régimen no lanzó fuegos artificiales y guarda silencio.
Parece que el fantasma del fiasco del Golfo sigue volando sobre las abandonadas torres de perforación de Repsol, PDVSA, Total y decenas de petroleras que se gastaron el oro y el moro por 10 años en Cuba, hasta que tiraron la toalla y se dieron por vencidas.
Ante esta inusual —y lógica— cautela del régimen, Milagros López citó al director de MEO, quien dijo pontificalmente: “La magnitud de este potencial no debe ser subestimada”.
Para ayudar al lector y de paso a Milagros López, un poco de historia.
Motembo fue el primer y hasta ahora único exitoso campo petrolífero hallado en Cuba por la Standard Oil Company, allá por el lejano 1881, y funcionó por 79 años, hasta 1960, cuando lo cerraron porque estaba seco. Su hallazgo solo cambió la vida de Motembo, nada más.
Hoy, algunos entusiastas, entre ellos Milagros López , esperan que el restablecimiento de las relaciones con los Estados Unidos ayude a la concreción del contrato, pero respecto a esto, el régimen castrista no ha lanzado ni un graznido ni movido un ala.
Después de haber leído estos avatares casuales y milagrosos, sería bueno saber si Milagros López, tan esperanzada como se muestra, trabaja para la MEO o para el régimen castrista. Le ruego me disculpe por lo inquisitivo y desconfiado, pero soy agnóstico “hasta la tambora”, como dicen los quisqueyanos, y no creo ni en milagros ni en casualidades.
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