MIAMI, Estados Unidos.- La madre de la niña de 13 años violada por cinco hombres en el municipio Cotorro, en La Habana, denunció a 14yMedio el silencio de las autoridades y la prensa oficial sobre el caso, y la impunidad de la que gozan los agresores, en libertad y sin un proceso judicial ni siquiera abierto.
“No fue una vaca que mataron, no fue un robo al Estado ni un revendedor que está en la calle buscándose cuatro pesos para comer. Fue una niña que violaron, algo que es un crimen aquí y en cualquier parte”, manifestó la madre de la menor al medio independiente.
Cleida García Díaz explicó que, por la paralización de muchos procesos judiciales a causa de la pandemia del coronavirus, el caso de la violación de su hija todavía no ha llegado a los tribunales, pero, peor aún es que la Policía dejó en libertad a tres de los responsables, y a los otros dos no les han impuesto tampoco prisión provisional, lamentó.
El hecho ocurrió luego de que un adulto llegó a la menor a través de la aplicación ToDus, y la amenazó, forzándola a tener relaciones sexuales, contó la madre a 14yMedio. “Eran muchos y tenía miedo de que la mataran”.
Según la nota, que cita las declaraciones de García Díaz, la abuela de la menor se dio cuenta de que esta no estaba en la casa hacia la media noche, y salió a buscarla. “Por el camino vio a unos custodios que estaban en una garita haciendo guardia y les preguntó”, los hombres afirmaron haber visto a la niña alejarse con un muchacho.
“Mi mamá siguió el camino que le indicaron hasta llegar a una casa donde sintió música. Se asomó y entró, pero escondieron a la niña y sacaron a mi mamá a empujones”. Fue entonces cuando la señora buscó ayuda, contó la madre de la menor.
“Me asusté mucho, porque llegó a la casa dando gritos. Mi esposo y mi mamá se fueron para el lugar de los hechos de nuevo”, y allí encontraron a un hombre que “se hizo pasar por la persona que rescató a mi hija, pero es un descarado que se quedó mirando lo que le hacían”, según la posterior declaración de la niña.
Después del examen realizado por medicina legal la familia interpuso una denuncia, y “enseguida cogieron a tres de ellos, pero a los otros dos, que están pasando el servicio militar y que ese día estaban fugados de la unidad, no los han tocado”.
Pero la tranquilidad duró poco para la familia de la menor violada, pues a los pocos días las autoridades dejaron a los agresores en libertad. “Fui al Registro de Alamar, donde se atienden estos casos, para que me dijeran por qué están sueltos esos hombres, y el instructor me dijo que ellos están ahora bajo una medida cautelar y que por el problema de la COVID-19 todo está paralizado”.
“Yo solamente quiero que se haga justicia, porque lo que hicieron con mi hija fue un crimen”. García Díaz relató que a su hija le contagiaron una bacteria y ha tenido que someterse a un tratamiento de antibióticos, así mismo, ha necesitado ayuda psicológica: “para estar tranquila y poder dormir tiene que estar a base de clordiazepóxido por todo lo que le hicieron esos criminales”.
“La llevé al psicólogo por mis medios y al médico la llevé por mis medios también, no se han preocupado por nada y esos delincuentes siguen en la calle”, reclamó.
Según cifras oficiales, los abusos sexuales contra menores crecieron en Cuba un 24% entre 2016 y mayo de 2019, lo que indica que cada cuatro horas un menor en Cuba sufre un delito sexual.
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