MIAMI, Estados Unidos. – Venezuela encabezó las cifras de crímenes violentos en América Latina durante el año 2020, con al menos 11 891 fallecidos y una tasa de 45,6 muertes violentas por cada cien mil habitantes, según cifras del Observatorio Venezolano de Violencia (OVV).
El reporte anual de la organización señala que los indicadores registrados responden a tres tipos de muertes violentas: homicidios cometidos por los delincuentes, muertes por resistencia a la autoridad y muertes de intencionalidad indeterminada
Según el Observatorio, en el año ocurrieron 4 153 homicidios cometidos por los delincuentes, para una tasa de 15,9 víctimas por cada cien mil habitantes.
En el caso de las muertes catalogadas por las autoridades como resistencia a la autoridad, se contabilizaron 4.231, tipificadas por el OVV como “homicidios cometidos por los cuerpos de seguridad del Estado, por un uso excesivo de la fuerza o mediante ejecuciones extrajudiciales, con una tasa de 16,2 víctimas por cada cien mil habitantes”.
También se registraron unas 3 507 muertes de intencionalidad indeterminada, calificadas oficialmente como averiguaciones de muerte. El Observatorio Venezolano de Violencia incluye aquí “homicidios que permanecen sin aclarar y muchas veces sin investigar, y cuya tasa estimada es de 13,4 víctimas por cada cien mil habitantes”.
La mortalidad por violencia durante 2020 en venezuela tuvo como víctimas principales los hombres, quienes representaron el 91% de los fallecidos.
El OVV reveló además que la mayoría de estas víctimas se encontraban en la edad productiva y cuando mayor aporte podían ofrecer a la sociedad y sus familias; el 68% tenían entre 18 y 40 años de edad y en un 99% eran venezolanos por nacionalidad.
La organización destaca que, pese a las elevadas cifras de homicidios, los resultados muestran una importante disminución en el número y en la tasa de muertes violentas en comparación con el año 2019.
“La pandemia y la cuarentena han conllevado una reducción de las actividades de la criminalidad de las pequeñas bandas y un incremento de las bandas de crimen organizado. Ha ocurrido también un desplazamiento del contexto de la violencia, pues disminuye la violencia en los espacios lejanos y ajenos, y se incrementa en los cercanos y familiares”, subraya el Observatorio en su informe.
El reporte agrega que los meses más violentos del año 2020 en Venezuela fueron enero y mayo. “En enero, la alta mortalidad se tuvo en los homicidios cometidos por delincuentes; mientras que en mayo el pico se debió a las muertes catalogadas como resistencia a la autoridad”.
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