LA HABANA, Cuba, 28 de febrero (Aleaga Pesant, PD / 173.203.82.38) -El limitado servicio de internet que reciben algunos funcionarios y profesionales del Ministerio de Transporte será limitado en más de la mitad, según fuentes de esa institución, ubicada en le céntrica Avenida Independencia y Tulipán, en Ciudad de La Habana.
La medida, a aplicarse a primeros de marzo, va dentro de un paquete mayor que tiende a evitar el uso de la red de redes y evitar la contaminación de los trabajadores de ese Ministerio con información del exterior, que está fuera del control de los medios oficiales.
Entre otras justificaciones para implantar la medida, está el excesivo uso de las impresoras por parte de los usuarios de internet, por lo que se impondrá un “mayor control” a través de la centralización de las impresoras.
Entre las principales víctimas de la medida se encuentra el vice ministerio de desarrollo y las direcciones de Planeamiento, Planificación financiera, Auditoria, Carga y Pasaje. También sufrirá la misma censura Seguridad Marítima.
Según la fuente de esta información, el flamante Ministro, el General de Brigada Cesar Ignacio Arocha Masid, sustituto de Jorge Luis Sierra Cruz, “es un déspota cercano a la ortodoxia comunista, que ve en internet un peligro para su institución y el gobierno. Ha dado públicamente su apoyo a sacar los tanques a la calle, en caso de manifestaciones civiles contra la revolución”.
Según el website de la Asamblea Nacional del Poder Popular, Arocha fue Director General de la Empresa de Transporte de Alimentos a Granel del Ministerio de Transporte. “Es graduado de las escuelas militares Camilo Cienfuegos y de ingeniero en vías férreas en la antigua Unión Soviética, así como en dos cursos de nivel superior en la Academia de las FAR General Máximo Gómez, con una trayectoria ascendente dentro de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, desempeñándose en diversos cargos de la cadena de mando como jefe de unidades de transportaciones militares y de la Logística.”
Para otras fuentes, Arocha Masid es un cercano del General de División Enrique Lussón Batlle, un octogenario vicepresidente del Consejo de Ministros y de su Comité Ejecutivo, de donde debe provenir la medida de censura.