MIAMI, Estados Unidos. – Como parte de su nueva política de ajustes a la actividad al trabajo por cuenta propia, el régimen cubano aumentó los impuestos a los arrendadores privados de habitaciones y viviendas a extranjeros, informó este miércoles el portal digital Diario de Cuba.
Según reveló a ese medio una arrendadora privada que solicitó anonimato, la Oficina Nacional de la Administración Tributaria (ONAT) determinó subir los impuestos para las habitaciones dentro de las viviendas con convivientes (hostales) a 60 CUC por habitación y a 70 CUC por habitación en los casos de las viviendas completas.
La medida, tomada sin previo aviso, supone un duro golpe para los arrendadores, quienes, además, tienen que lidiar con la caída de la demanda.
“Antes pagaba 70 CUC mensuales (35 por cada habitación) por concepto de licencia, más el 10% sobre los ingresos personales. Ahora debo pagar 140 CUC (70 por cada habitación)”, dijo a Diario de Cuba la propietaria del inmueble, que alquila la vivienda completa.
El reciente aumento de impuestos afecta, principalmente, a negocios de los municipios Plaza de la Revolución, Centro Habana y La Habana Vieja, zonas más turísticas de la ciudad y que acumulan la mayor cantidad de instalaciones hoteleras y centros de recreación.
La situación ha llegado a tal punto que no pocos arrendadores privados ya han anunciado que acudirá a las oficinas de la ONAT para discutir la legalidad de las nuevas normativas, las cuales, según dicen, constituyen una violación de sus derechos. Otros, en cambio, van más allá y no dudan en asegurar de que entregarán sus licencias.
De momento, funcionarios de la ONAT se han negado a aclarar si el incremento obedece a acuerdos de los Consejos de Administración Municipales de las Asambleas del Poder Popular o si son directivas impulsadas desde altas instancias del régimen para garantizar mayor cantidad de ingresos ante el poco crecimiento experimentado por el sector del turismo durante el pasado año.