MARTÍNOTICIAS (Redacción) – Una cláusula que prohíbe el uso de fondos públicos estadounidenses en relación con exportaciones a la clase militar cubana fue aprobada el miércoles por el Comité de Asignaciones de la Cámara de Representantes, como parte del proyecto de presupuesto 2016 para los Departamentos de Comercio y Justicia, la Oficina de Ciencias y otras Agencias Relacionadas (CJS por sus siglas en inglés).
La Sección 540 del borrador prohíbe expresamente la utilización de fondos para facilitar, permitir, licenciar o promover exportaciones a las fuerzas armadas de Cuba, sus servicios de inteligencia, a cualquier oficial de las fuerzas armadas de Cuba o de sus servicios de inteligencia, y a sus familiares inmediatos, desde padres, cónyuges e hijos hasta tíos y sobrinos.
El congresista cubanoamericano Mario Díaz-Balart (R-FL), miembro de ese Comité, manifestó su firme apoyo al plan, aprobado por 242 votos a favor y 183 en contra, especialmente la disposición que prohíbe las exportaciones a los militares cubanos.
“El 17 de diciembre de 2014, el Presidente Obama declaró: ’Creo que más recursos deben poder llegar al pueblo cubano’ La disposición en el CJS asegura que las exportaciones a Cuba logren precisamente ese objetivo. El presidente Obama incluso creó una excepción dentro de la prohibición general de exportaciones a Cuba titulada ‘Apoyo al pueblo cubano (SCP)’. Ciertamente, el apoyo al pueblo cubano no debe incluir la canalización de bienes a los militares cubanos y el servicio de inteligencia que les oprimen a través de detenciones arbitrarias, violencia, intimidación y encarcelamientos injustos”. dijo Díaz-Balart en un comunicado de su oficina.
“Las exportaciones entregadas a los militares cubanos no harán nada para beneficiar al pueblo (…), sino que sólo pueden financiar directamente al brazo opresor de la dictadura castrista. La escueta y sensata disposición incluida en el CJS no prohíbe las exportaciones a Cuba, simplemente asegura que las exportaciones estadounidenses no puedan ser controladas por los militares y el servicio de inteligencia cubanos”.
El congresista se refirió asimismo al papel que desempeñan los militares cubanos como “un malévolo actor en el escenario mundial”: “No sólo son responsables de oprimir al pueblo de Cuba, sino que se involucran en el tráfico de armas ilegales y la subversión de las instituciones democráticas en Venezuela, y ayudan a organizaciones terroristas extranjeras y otros regímenes criminales como el de Corea del Norte. Además, varios miembros de las fuerzas armadas de Cuba permanecen bajo acusación por el asesinato de ciudadanos estadounidenses inocentes”, agregó el legislador.
Por su parte la también representante republicana por la Florida Ileana Ros-Lehtinen expresó su complacencia por la derrota, 273-153, de una enmienda presentada por su colega demócrata por California Sam Farr, que habría derogado las cláusulas que prohíben las exportaciones a la clase castrense de la isla:
“Me complace ver la derrota de la enmienda Farr, que habría fortalecido a las represivas fuerzas armadas y el aparato de inteligencia de Cuba. Los militares cubanos y su servicio de inteligencia han sido responsables de cometer graves abusos en materia de derechos humanos contra el pueblo cubano, asesorar y entrenar a las fuerzas armadas venezolanas que en 2014 fueron responsables de asesinar a muchos venezolanos inocentes, y del asesinato de cuatro personas en el derribo de las avionetas de Hermanos al Rescate, tres de ellos ciudadanos estadounidenses”.
“Prohibir usar fondos para facilitar exportaciones a las fuerzas armadas del régimen de Castro y a sus servicios de inteligencia es una de las medidas más elementales que podemos adoptar para ayudar al pueblo cubano. Sólo al endurecer las sanciones podemos esperar que se debilite el aparato represivo de los Castro”, consideró Ros-Lehtinen.
En el Senado, los tres miembros cubanoamericanos, Marco Rubio, Ted Cruz y Bob Menéndez, están patrocinando con otros colegas un proyecto de ley paralelo dirigido a negar recursos estadounidenses a los militares cubanosque controlan la economía generadora de divisas.