LA HABANA, Cuba, 31 de octubre (Dania Virgen García, 173.203.82.38 ) -Norberto Muñoz Palomino, recluido en la prisión de Quivicán, en la provincia de Mayabeque, desmiente la versión de Seguridad del Estado respecto a la muerte bajo custodia del recluso Salvador Ferrer Rodríguez, ocurrida en mayo de este año.
Salvador Ferrer murió al ser salvajemente golpeado por los guardias y, al producirse el hecho, Muñoz Palomino y Suárez Torres así lo informaron, desde la prisión, al periodista independiente Roberto de Jesús Guerra. Muñoz
Palomino relató que, inmediatamente después de que se publicara la noticia por la prensa independiente, la Seguridad del Estado los amenazó con que tomarían represalias contra su familia y con que podrían ser asesinados por otros reclusos, si no desmentían la información que habían dado a la prensa independiente.
Según Muñoz Palomino, él y el recluso Alexander Suárez Torres, fueron obligados por oficiales de la Seguridad del Estado, el jefe de la prisión, William Gaizán Lores, y el capitán Frank, a que declararan en un video que fue grabado que el reo Salvador Ferrer Rodríguez no había sido asesinado por funcionarios de orden interior.
Muñoz , dice hoy estar arrepentido de haber cedido ante las amenazas. Explica que ellos tuvieron miedo y por eso desmintieron la información y pide que el periodista independiente Roberto de Jesús Guerra los disculpe.