MIAMI, Estados Unidos. – La organización no gubernamental Artículo 19 presentó este lunes el informe “Silencio y destierro, el exilio forzado de periodistas independientes en Cuba” con la participación de varias reporteras de la Isla obligadas a exiliarse.
Durante la presentación del informe, la ONG reconoció que, aunque la violencia del Estado cubano contra voces críticas no es nueva, se ha recrudecido en los últimos años.
“Llevo casi cuatro años ejerciendo el periodismo independiente en Cuba y esto yo lo equiparo a ser corresponsal de guerra. En 2021, la organización por la libertad de expresión y prensa registró 1129 represiones contra comunicadores y al menos 508 agresiones en 2022”, dijo la reportera de CubaNet Camila Acosta, la única que intervino en la presentación desde La Habana.
Por su parte, la periodista Cynthia de la Cantera, de YucaByte, contó que la Seguridad del Estado la amenazó con iniciar un proceso legal en su contra si no abandonaba el periodismo. “De manera forzada, renuncié al periodismo, lo cual ha tenido un impacto emocional y a todo mi entorno”, lamentó.
“Llevo tres años fuera de Cuba. El exilio forzado no solo es que te presionen a salir de tu país, es el no saber qué te puede pasar si intentas volver. La decisión de hacer periodismo fuera de Cuba conlleva una serie de renuncias personales”, dijo a su turno Darcy Borrero, residente en Miami y actualmente colaboradora de Diario Las Américas.
Por otro lado, desde Argentina la periodista de CubaNet María Matienzo recordó: “Al empatizar con tanto sufrimiento una pierde los límites entre activismo y el periodismo. Uno de los problemas graves del periodismo independiente es que lo hacemos desde la precariedad tecnológica, económica y de información”, lamentó.
Finalmente, Luz Escobar, reportera de 14ymedio exiliada en España, reconoció que viviendo en otro país el “reto es hacer periodismo desde el exilio”.
En su informe, Artículo 19 identificó los mecanismos del Estado cubano que violan sistemáticamente los derechos a la libre expresión e información, entre otros.
“Entre la diversas prácticas, ha llamado en especial la atención el hecho de amenazar, acosar e intimidar a las y los periodistas, pero también a sus colegas, familiares y amistades hasta conseguir que la persona renuncie a su labor como periodista, delate a sus colegas del medio de comunicación o se vea obligada a salir del país para no volver más”, concluyó la ONG.
De acuerdo con Artículo 19, “el uso recurrente de estas prácticas se ha intensificado luego de las manifestaciones del 11 de julio de 2021 y ha formado parte de la agudización de la ola represiva desatada por las autoridades. Mediante amenazas que ejercen funcionarios del Departamento de la Seguridad del Estado (DSE), se obliga a las y los periodistas independientes a salir del país. Esto significa la ruptura de su plan de vida, el desarraigo, la separación familiar, así como la imposibilidad de regresar a Cuba”.
Solo entre 2021 y los primeros 10 meses de 2022, Artículo 19 documentó el exilio forzado de ocho periodistas que declararon expresamente que salieron de Cuba por presiones de los agentes del DSE, como una pequeña muestra de lo que personas periodistas y comunicadoras están enfrentando dentro de la Isla.
“Además ―subraya el informe―, estas padecen una agresión de doble vía: no solo son forzadas a salir de Cuba sino que también se les impide regresar debido a que las autoridades le imponen una restricción de ingreso al país donde nacieron y del cual son ciudadanas. Al obligarles a salir e impedirles regresar por su condición de periodistas, el Estado cubano viola los derechos a las libertades de expresión y prensa, al acceso a la información y al libre tránsito”, también señala el texto.