MIAMI, Estados Unidos. – Tras dos jornadas de trabajo y varias reuniones con empresarios y altos dirigentes del régimen cubano, el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, finalizó su visita oficial a la isla, informó la Agencia Cubana de Noticias (ACN).
Sánchez puso fin a su agenda en Cuba en la noche de ayer con una multitudinaria recepción en la residencia del embajador de España en La Habana.
Según EFE, al evento asistieron monjas y sacerdotes católicos que llevan décadas en la isla, cooperantes, empresarios y artistas. Todos se dieron cita en el jardín de la casona colonial, una de las pocas residencias diplomáticas de La Habana que no es propiedad del Estado cubano, sino del español.
Allí, además de intercambiar con la colectividad española en la isla, se reunió con un grupo de emprendedores y miembros de la “socialite” cubana, entre los que se encontraban propietarios de “paladares” como Niuris Higueras, de Atelier, o Enrique Núñez, impulsor del famoso “La Guarida”, y diseñadoras como la pareja hispano-cubana formada por Leire Fernández e Idania del Río, creadoras de la marca “Clandestina”.
También participaron del encuentro con Sánchez el escritor Leonardo Padura, premio Princesa de Asturias de las Letras en 2015; el actor Jorge Perugorría; el músico Carlos Varela; entre otros.
“Me he reunido en La Habana con la sociedad civil que quiere transformar Cuba. Mi gobierno no les defraudará. Nunca les faltará nuestro aliento para construir una Cuba moderna con el apoyo fraternal de España”, escribió en Twitter el líder del Ejecutivo español tras verse con este grupo.
Sin embargo, durante su visita de dos días a la isla, Sánchez ignoró por completo a la disidencia cubana. En ese sentido, el mandatario no solo no concertó un encuentro con la oposición y otros sectores de la sociedad civil, sino que eludió varias preguntas sobre el tema durante la conferencia de prensa que ofreció en el Museo de la ciudad, ubicado en el casco histórico de La Habana.