MIAMI, Estados Unidos. – El papa Francisco llamó “dictadura grosera” al régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo en Nicaragua, en una entrevista concedida al medio argentino Infobae.
El sumo pontífice hizo tales declaraciones después de la condena a 26 años y cuatro meses de prisión del obispo nicaragüense Rolando Álvarez, quien ha sido muy crítico con el régimen de Ortega.
“Con mucho respeto, no me queda otra que pensar en un desequilibrio de la persona que dirige [Ortega]. Ahí tenemos un obispo preso, un hombre muy serio, muy capaz. Quiso dar su testimonio y no aceptó el exilio”, dijo el papa.
Francisco agregó que la situación en Nicaragua era equivalente a “traer la dictadura comunista de 1917 o la hitleriana del 35”. Las definió a todas como “dictaduras groseras”.
El sumo pontífice también definió la situación en Nicaragua como “una cosa que está fuera de lo que estamos viviendo”.
El obispo Álvarez fue condenado por el supuesto delito de “traición a la patria” por provocar la furia de Daniel Ortega con sus críticas.
Monseñor Álvarez rechazó abandonar el país junto con otros 222 excarcelados políticos nicaragüenses que fueron expatriados, lo que provocó la furia de Ortega, que lo tachó de “soberbio”, “desquiciado” y “energúmeno”.
Ortega también ha acusado a la Iglesia de ser antidemocrática por no permitir que los católicos elijan por voto directo al papa, a los cardenales, a los obispos y a los sacerdotes.
Pese a sus duras críticas contra Ortega, el papa Francisco es cercano a aliados del régimen nicaragüense. A mediados de 2022, el sumo pontífice reveló a la cadena de noticias Univisión que tenía una relación “humana” con el dictador Raúl Castro.
El sumo pontífice también admitió tener vínculos con el régimen de Cuba, país que ha visitado en dos ocasiones desde que se convirtió en papa.
“Yo quiero mucho al pueblo cubano, lo quiero mucho y tuve buenas relaciones humanas con gente cubana. Y también, lo confieso, con Raúl Castro tengo una relación humana”, señaló Francisco.