ESTADOS UNIDOS. – Cuando una novena está inspirada hay que respetarla. Y eso está ocurriendo con los Nacionales de Washington que luego de avanzar a la postemporada como equipo comodín, ha derrotado contra los pronósticos de los expertos a todos sus rivales y ahora se encuentra a sólo dos victorias de ganar la Serie Mundial.
Con el juego empatado a dos carreras en la séptima entrada en lo que hasta ese momento era un duelo de lanzadores, Kurt Suzuki conectó jonrón solitario para poner arriba a su equipo que minutos después anotó otras cinco carreras en la victoria de los Nacionales de Washington 12-3 sobre los Astros en el segundo partido ante 43,357 aficionados en el Minute Maid Park.
Las dos novenas anotaron dos en el primer episodio. Los Nacionales ante Justin Verlander por pasaporte a Tyler Turner, sencillo de Adam Eaton y doblete por el bosque izquierdo de Anthony Rendon. Los Astros lo hicieron por sencillo de Michael Brantley y jonrón de Alex Bregman. A partir de este momento, Verlander colgó cinco escones y Strasburgh otros cinco.
Houston amenazó en el sexto luego de un out por doblete de línea al izquierdo de Yuli Gurriel y pasaporte intencional a Yordan Alvarez, pero Strasburg dominó a Carlos Correa en elevado a segunda y al emergente Kyle Tucker por los strikes.
En la fatídica séptima entrada para los Astros se cumplió un viejo refrán beisbolero que dice: “el que no hace carreras, se la anotan a ellos’. Y así sucedió cuando Suzuki conectó su bambinazo para poner a su equipo arriba 3-2. Para Suzuki fue su primera carrera impulsada de la postemporada.
Pero el problema no terminó ahí para Houston, pues Verlander le dio base por bola a Víctor Robles y a su rescate llegó Ryan Presley que dominó a Rendon en elevado corto al central, Juan Soto recibió pasaporte intencional, Howard Kendrick roleteó lento a la izquierda del antesalista y Bregman no pudo retener la bola anotando la segunda; Asdrúbal Cabrera le siguió con cohete para remolcar dos, Ryan Zimmerman dio machucón por tercera que se convirtió en sencillo y con un tiro malo a la inicial los Nacionales pisaron la goma otras dos veces ampliando el marcador 8-2.
Washington sumó tres en la octava por jonrón de Eaton con un hombre en circulación y una remolcada de Cabrera. Luego en la novena, Michael Taylor dio cuadrangular para poner la pizarra 12-2.
En la lomita el dominicano Fernando Rodney colgó el cero en el séptimo, la octava la tiró Tanner Rainey y en la novena Javy Guerra toleró un jonrón solitario de Martín Maldonado para la tercera anotación de Houston.
Además del buen cuerpo de lanzadores, los Nacionales cuentan con buenos bateadores y algunos que no lo son tanto también se encuentran inspirados con hambre de victoria. Mientras que los Astros no andan bien de bateo produciendo muy poco con hombres en bases, con la excepción en esta Serie Mundial de José Altuve que promedia .400, Michael Brandley (.375), los cubanos Yuli Gurriel (dos dobles y tres impulsadas) y Yordan Alvarez que suma tres incogibles en seis turnos (.500) con dos pasaportes.
El pitcher ganador fue Stephen Strasburgh que tiró seis entradas con dos carreras permitidas, siete imparables, dio una base por bola y ponchó a siete bateadores. La derrota la sufrió Justin Verlander que toleró cuatro carreras en seis entradas, siete incogibles incluyendo un jonrón, regaló tres pasaportes y ponchó a seis.
Entre los latinos por Houston Yuli Gurriel de 4-1 (doble), Yordan Alvarez de 3-1 y un pasaporte, los boricuas Carlos Correa de 4-0 y Martín Maldonado de 1-1, los venezolanos José Altuve de 5-3 y Robinson Chirinos de 2-0. Por Washington, el dominicano Juan Soto de 3-1 y dos anotadas, su compatriota Víctor Robles de 3-0, el venezolano Asdrúbal Cabrera de 5-2 con tres remolcadas.
La Serie Mundial se traslada a la capital de la nación para tres desafíos. El tercer juego será el viernes (8:07 p.m.) en el National Parks lanzando por los Astros Zack Greinke y por los Nacionales el venezolano Aníbal Sánchez.
Houston está obligado a ganar dos juegos para tener la oportunidad de enviar la batalla a su estadio. La serie 0-2 en contra desde que se inició el formato 2-3-2, sólo tres veces en 25 oportunidades (12%) el equipo que marcha en contra ha logrado recuperarse para ganar la Serie Mundial. La última ocasión ocurrió en 1996 con los Yankees de Nueva York.
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