MIAMI, Estados Unidos.- El nuevo comentario machista del dictador venezolano Nicolás Maduro ha desatado la polémica en redes sociales, luego de que dijera este domingo que su esposa, Cilia Flores, es de su propiedad.
En un acto transmitido por Venezolana de Televisión (VTV), el chavista manifestó: “Vladimir (Villegas), si yo fuera dueño de Globovisión, te devolviera tu programa, pero de lo único que soy dueño es de Cilia. La única propiedad que tengo es Cilia”, dijo.
Las declaraciones se suman así a una larga lista de expresiones machistas, xenófobas y homofóbicas del mandatario, y que se han vuelto además una constante en la alta plana del gobierno venezolano.
Con motivo del Día de la Mujer, el pasado mes de marzo, pese la crisis que atraviesa el país y los altos índices de pobreza y desnutrición, Maduro incitó a las mujeres a tener varios hijos, después de que una venezolana que asistió al acto, promovido por el chavismo para impulsar un programa social que promueve el parto natural, le dijera al dictador: “que Dios te bendiga por haber dado a la patria seis muchachitos y muchachitas”.
Maduro le contestó: “A parir pues, a parir, todas las mujeres a tener seis hijos, todas. ¡Que crezca la patria!”.
Por su parte, el pasado 30 de octubre, el vicepresidente Sectorial de Comunicación, Cultura y Turismo, Jorge Rodríguez Gómez, se refirió a la orientación sexual del periodista Roland Carreño, detenido ilegalmente por la dictadura.
El funcionario chavista mostró supuestos mensajes y fotografías privadas del comunicador y líder opositor durante una conferencia de prensa.
Al respecto, en 2012, durante una concentración frente a la sede de la Embajada de Cuba en Caracas, Nicolás Maduro, entonces canciller, atacó a los detractores del chavismo: “Así será la calaña de estos sifrinitos, mariconsones y fascistas que pretenden darle lecciones al pueblo de Venezuela, pero no han podido y no podrán jamás”.
En 2013, luego de la muerte de Hugo Chávez, Maduro atacó por su orientación sexual al opositor Henrique Capriles Radonski, con quien se enfrentó en unas elecciones convocadas por el gobierno.
En un mitin político, llamó a la tarima a Cilia Flores: “Yo sí tengo mujer, ¿oyeron? Me gustan las mujeres, y aquí la tengo. ¡Qué bueno es un beso de una mujer, verdad!”.
En 2018 el dictador chavista volvió a atacar a Capriles, a quien tildó de “Capriloca”.
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