MIAMI, Estados Unidos. – El satélite Terra de la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio (NASA, por sus siglas en inglés), capturó hace pocos días una impresionante imagen de los estrechos límites que separan a Cuba, Estados Unidos y Las Bahamas
En la imagen se aprecian los increíbles contrastes del color azul del mar, en comparación con las aguas poco profundas que lucen en color turquesa, así como también los bancos de Cay Sal y de Bahamas, ambas zonas formadas por minerales de carbonato que se producen por diversas bacterias y organismos marinos que han sido depositados en el fondo del océano durante millones de años.
En el caso específico de Cuba, se pueden observar los ecosistemas no desarrollados (bosques y humedales), los cuales abarcan el 53% de la superficie terrestre. Mientras que alrededor del 40% es utilizado para la agricultura, destacando cultivos como yuca, tabaco, toronja y azúcar.
If you are somewhere gray and chilly, take a moment to soak up some beautiful satellite views of beaches, reefs, shoals, and sand in #Cuba and the #Bahamas. https://t.co/l4n8C6ywUq https://t.co/OooqSPuNO1 https://t.co/sFH6V7qiB1 #NASA #MODIS #Landsat pic.twitter.com/ymJiCco7DU
— NASA Earth (@NASAEarth) 17 de diciembre de 2018
El análisis de la foto también reveló que los embalses sólo cubren cerca del 1% de la superficie de la isla, mientras que las ciudades no alcanzan ni el 1%.
Los expertos señalan que Cuba posee el ecosistema de manglares más intacto del Caribe. Los mismo representan un importante recurso para la vida silvestre, por lo que se advierte poner especial cuidado en la reapertura gradual de Cuba, lo que ha traído más turistas e inversión extranjera, dos factores que han afectado de manera severa los ecosistemas naturales de gran parte del Caribe.
Para Gillian Galford, científica de teledetección de la Universidad de Vermont, “Cuba es una rareza ecológica en América Latina y el Caribe”.
La Isla, conocida por tener grandes extensiones de bosques y manglares, también exhibe magníficas playas y marismas de pastos marinos, además de arrecifes de coral sin perturbaciones.
“Su compleja historia política y económica muestra limitados disturbios, extinciones, contaminación y agotamiento de recursos”, añadió la especialista en un informe realizado durante el presente año 2018.