MIAMI, Estados Unidos. — El 20 de mayo de 1902 comenzó en Cuba el levantamiento de los Independientes de Color, que terminó con la matanza de más de 3.000 negros y mestizos.
El suceso, también conocido por Masacre de los Independientes de Color o Guerra de 1912 en Cuba, fue llevado a cabo por los miembros del Partido Independiente de Color (fundado en 1908) en su afán de reclamo por la igualdad social y política de los negros en la Cuba de principios de siglo XX.
El levantamiento fue cruelmente sofocado con la muerte de al menos 3.000 negros y mestizos, contrarios a las fuerzas del gobierno del entonces presidente José Miguel Gómez, que tuvieron solamente 12 bajas.
Bajo la dirección de Evaristo Estenoz y del general mambí Pedro Ivonet, los negros se alzaron principalmente en Las Villas y en la totalidad de la provincia de Oriente, con algunos sucesos en Matanzas y La Habana.
El objetivo de la acción armada era obligar a que el Partido Independiente de Color fuese legalizado.
Los cabildos y las sociedades de color cerraron y la mayoría de los negros apenas se exponían por temor a vejaciones y linchamientos. Los alzamientos de Alto Songo y La Maya, en Santiago de Cuba, fueron los mayores registrados.
El 27 de junio de 1912, Estenoz fue fusilado a junto con 50 compañeros, —algunas fuentes apuntan a un suicidio antes de caer preso el día 26—. El golpe final contra el levantamiento se produjo el 12 de julio, día en que el general mambí Pedro Ivonet se rindió en las cercanías del Caney. El general mambí murió mientras trataba de escapar.
Con la desaparición física de sus líderes, el movimiento de los independientes de color llegó a su fin. El fin de la insurrección fue también el fin del Partido Independiente de Color.