VILLA CLARA.- En horas de la tarde del martes, tras 24 horas de buceo incesante por parte de las autoridades, fue hallado en el Canal de Los Barcos, el auto que conducía el Delegado Territorial de la firma-constructora-militar nombrada ALMEST, con el cuerpo del ahogado asido al timón.
La información fue brindada a CubaNet por testigos presenciales del suceso y compañeros de trabajo del fallecido.
El auto cayó al agua cuando conducía por el pedraplén que une a Cayo Santamaría con la ciudad de Caibarién, en una jornada signada por lluvias asociadas a una vaguada persistente sobre el centro norte del país.
Su nombre era José Ramón Medina Rodríguez, de 53 años de edad, oriundo de Zulueta, poblado adscrito al vecino municipio San Juan de los Remedios, lugar donde se velaron sus cenizas, pues fue cremado de inmediato dado el avanzado estado de descomposición.
Se trata del cuarto accidente con lesionados leves, medianos y graves que ocurre en los días previos a la FIT 2018 en la provincia que desarrolla el evento por segunda ocasión, y como en los dos sucesos de tránsito anteriores, la prensa no ha dicho a tiempo ni una sola palabra.
De tarde el pasado domingo 22, un ómnibus con trabajadores de la hotelería impactó de frente a una rastra repleta de combustible con saldo de dos mutilados y una docena de heridos leves.
Anteriormente, otro chofer de camión arremetió contra un vehículo mal parqueado sobre esta carretera sin perímetros ni barandas, causando estragos a su persona.
El lunes 30 de abril, un coche de tracción animal provocó que un trasporte cargado también de personal se volcara en áreas cercanas al peaje, con lesionados y daños materiales considerables.
La vía, que sufre de los intensos arrastres del mar, y que no obstante cuenta a su haber premios a la excelencia en la construcción —como El Puente de Alcántara (2001) otorgado por España, principal inversionista con la Meliá al frente—, ha sido remendada periódicamente sin conseguir garantías.
Hace apenas dos años, una pareja de franceses —coinversionistas radicados aquí de la multinacional Bouygues Batiment—, que intentaban acercarse a la capital del país para asistir al concierto de los Rolling Stones, sucumbió en el intento tras un estrepitoso choque ocurrido de madrugada debido a badenes invisibles de la carretera.
El reclamo de los familiares de los fallecidos al gobierno cubano, aún sin acuerdo tácito ante tribunales internacionales, sobrepasa los 8 millones de euros.
Las causas de los desastres continuados han estado asociadas a obvias somnolencias de los conductores sobreexplotados, al ingente ajetreo que por estas fechas se ha desplegado sobre la zona, también a una muy baja “temporada alta” que ha resultado blanco del relanzamiento comercial tras la caída del sector que tan escasa variedad oferta, así como de falseadas promociones de turoperadores.
El dirigente, que lideraba esta otra firma “anónima” del complejo militar-industrial —cuyas siglas son apócope de los también oficiales desaparecidos Juan Almeida y Armando Mestre—, fue uno de los pocos “elegidos” para quedarse dentro de sus propias obras e instalaciones hoteleras, cuando el huracán Irma asoló aquellas playas el pasado septiembre.