HOLGUÍN, Cuba.- Las muertes por dengue hemorrágico siguen golpeando a esta provincia nororiental cubana ubicada a 700 kilómetros de La Habana.
El municipio cabecera reporta “transmisión de zika y dengue, que aportan un número de fallecidos” en sus nueve áreas de salud, reconoció este miércoles el doctor Luis Arley, director provincial de Salud Pública, sin ofrecer detalles, en un programa especial transmitido este miércoles por el canal local Telecristal.
El incremento descontrolado de los casos ha rebasado “la capacidad de nuestros hospitales”, y ha obligado a las autoridades a “abrir otras capacidades”, en las que se han invertido recursos “que no estaban previstos dentro del plan y el presupuesto”, afirmó Arley.
En julio y agosto funcionó un hospital de campaña para casos de zika y dengue en la Filial de Enfermería Arides Estévez. Con el inicio del curso escolar, y ante la incapacidad de las autoridades sanitarias para detener la epidemia, el improvisado hospital fue trasladado hacia una sección del Instituto Tecnológico de Holguín (ITH) Calixto García Íñiguez.
“Aquí las condiciones no son las mejores”, comentó a CubaNet Indira Paneque, madre de un joven de 22 años ingresado hace tres días.
“La alimentación es poca y de mala calidad. Mi esposo nos trae el almuerzo y la comida que cocina en la casa”, dice Paneque.
El ITH está situado a siete kilómetros al oeste de la ciudad con poca disponibilidad de ómnibus para cubrir la ruta.
“Mi esposo y yo somos cuentapropistas y hemos tenido pérdidas en el negocio por esta situación”, afirma la desconsolada mujer.
El municipio Holguín, con 300 mil habitantes y capital del tercer polo turístico cubano, tiene un índice de infestación por encima de 2 del mosquito Aedes aegypti, vector transmisor de la enfermedad. Es el índice más alto a nivel nacional, informó el doctor Eduardo Michel Serrano, Director Municipal de Higiene y Epidemiologia, a la televisora.
“Con esta alta infestación, nuestros hospitales se abarrotan, están llenos nuestros servicios y evidentemente es un número considerable”, reconoció Serrano.
Precisó el directivo que “los casos sospechosos de dengue y zika en el municipio tienen un nivel de concordancia del 95 al 99 por ciento” según los resultados de las muestras analizadas en el laboratorio nacional del Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí (IPK), centro científico cubano creado para el estudio, prevención, control y erradicación de las enfermedades transmisibles.
“Por lo tanto, la circulación viral en Holguín es latente y el número de enfermos es elevado”, remarcó el facultativo.
La situación se ha tornado más dramática ante el déficit de operarios para el tratamiento adulticida (fumigación) e intradomiciliario como parte de la campaña antivectorial.
Entre las medidas para revertir la crisis, las autoridades sanitarias decidieron emplear a los estudiantes de la universidad Oscar Lucero Moya para realizar la tarea.
“Estamos aquí obligados”, confesó Ernesto, estudiante de ingeniería, en conversación con CubaNet.
“Este trabajo nadie lo quiere porque pagan muy poco y sin condiciones para el desempeño, por eso nos fueron a buscar”, dice el joven.
Los universitarios holguineros, desde segundo a quinto año, se incorporarán paulatinamente a la campaña antivectorial y para ello se ha realizado un reajuste del plan de estudios, según dijo a CubaNet un directivo bajo identidad reservada.
Ernesto asegura que la decisión se tomó sin contar con los estudiantes, que después recibirán las clases de forma “atropellada”, lo que podría afectar sus resultados académicos.
La grave situación epidemiológica es el resultado del mal trabajo de la dirección de salud en el territorio. En reiteradas ocasiones Luis Torres Iribar, máxima autoridad comunista en la provincia, ha criticado públicamente los problemas del sector.
“Demasiados problemas en Salud; más allá de la falta de medicamentos, cosas que tienen que ver con disciplina, con control, con exigencias en los cuadros, con tocar las cosas con las manos”, dijo el funcionario.