MIAMI, Estados Unidos.- Yeris Curbelo Aguilera y Yusmel Acosta Aguilera, miembros de la Alianza Democrática Oriental, fueron citados este 13 octubre para la unidad policial de Guantánamo conocida como Parque 24, donde un oficial de la policía política los amenazó con llevarlos a la cárcel.
“Me dijeron que les habían aprobado 10 casos para llevar a prisión, y que ellos no perdían nada con llevarme a mí a la cárcel. Todo por entregar en el municipio de Caimanera fotos del José Martí”, contó Acosta Aguilera.
Curbelo Aguilera, por su parte, relató que una vez llegaron a la estación policial tres agentes de la Seguridad del Estado estaban esperándolos, y aunque inicialmente la citación era para Yusmel, le informaron que también iban a hablar con él.
“Yo les dije que no me habían citado, y por eso yo no tenía que hablar con ellos, pero decidieron entrarme por la fuerza. Me multaron con 600 pesos por el 24 de septiembre haber participado en la campaña Compromiso Democrático, en el municipio Caimanera, donde resido”.
Como parte de esta iniciativa, los activistas pegaron en los postes del municipio guantanamero fotos de José Martí. La campaña les ganó amenazas y agresiones por parte del régimen cubano.
Yusmel Acosta Aguilera contó que los oficiales de la policía política lo amenazaron con “que si seguía en el activismo me iban a golpear, y no iba a saber más de mi familia, porque ellos tienen métodos para desaparecernos”.
“Yo no he cometido ninguna ilegalidad, yo solo lucho por la independencia de Cuba”, señaló Acosta Aguilera, a quien también le impusieron una multa de 600 pesos.
El oficial que se hace llamar Luis Ángel agredió en la cabeza a Curbelo Aguilera, denunció, “y me dijo que eso no era nada, que ellos me podían matar si querían. Que ellos no estaban de acuerdo, ni iban a permitir mi acción en las calles”.
Los activistas mostraron su desacuerdo con que el gobierno cubano fuera incluido este martes en el Consejo de los Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas (ONU), “pues llevamos más de 60 años soportando que nuestros derechos sean atropellados”.
A pesar de las innumerables denuncias de organizaciones dentro y fuera de Cuba, el régimen castrista ocupará por los próximos dos años un escaño en la Comisión mundial que se debe encargar de defender los derechos humanos.
“No es razonable que una dictadura que ha reprimido por más de seis décadas a sus ciudadanos, como a mí, que he tenido que ir a prisión en varias ocasiones, me han dado golpe delante de mi hijo y de mi madre, sea incluido en ese organismo”, dijo visiblemente afectado Yeris Curbelo Aguilera.
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