LA HABANA, Cuba.- El grafitero Yulier P permanece arrestado en la capitalina estación de policía de Zanja y está siendo amenazado con un proceso de investigación por grabar la pared restante de un derrumbe en la esquina Escobar y San Lázaro, en Centro Habana.
“Llegamos a las 7 de la mañana”, cuenta su esposa Maylet Serrano, quien estaba en el lugar junto a otros dos amigos del artista. “Él hizo todo su ritual, empezó a pintar y 20 minutos después llegó la patrulla. Entonces los vecinos salieron y se armó tremenda discusión”.
Maylet dice que los policías querían quitarles las cámaras de fotografía, pero “como vieron que era todo el solar defendiéndonos, llamaron a otro patrullero en el que llegó el jefe de grupo”.
Los policías le dijeron que no podía hacer el grafiti porque ese derrumbe era “una obra urbanística” y el grafiti “maltrata el ornato público”.
“No nos dejaron grabar la detención, pero fuimos detrás de ellos y vimos cómo lo entraban a Zanja por la puerta trasera”, denuncia Maylet.
Arturo Bermúdez, uno de los vecinos que más reclamó los derechos del artista, cree que fue una delación: “El jefe de la policía de Zanja vive cerca, o a lo mejor fue del policlínico que queda enfrente. Pero la verdad es que debieran preocuparse más por la basura que se acumula en ese lugar que por un grafiti”, y se asombra cuando se entera que al cabo de cuatro horas el artista aún está detenido.
“Pues mira, a mí me engañaron entonces, porque ese último que llegó”, y se refiere al jefe de grupo, “dijo que solo se lo llevarían para quitarle el video que había hecho y ponerle una multa”.
Lo mismo pensaba Maylet hasta que recibió una llamada de Yulier diciéndole que tenía que esperar por un instructor.
“Desde que Yulier llegó de Nueva York han querido construirle algo”, analiza la esposa del artista, que no se deja intimidar pese a su corta edad. “Hemos recibido varias citaciones desde entonces. A mí me amenazaron con que yo sufriría las consecuencias de todo lo que hiciera él (Yulier), como si estuviera casada con un delincuente”.
El viaje a Nueva York del grafitero fue con motivo de entrevistas para el documental de la realizadora Vida Lercari sobre su obra.
Este es el primer trabajo que intenta hacer luego de su regreso.