MIAMI, Estados Unidos. – El asesor de Seguridad Nacional de Estados Unidos, John Bolton, denunció la implicación de agentes cubanos en la muerte del capitán de corbeta de la Armada, Rafael Acosta Arévalo, uno de los militares venezolanos supuestamente vinculados a una conspiración contra Nicolás Maduro.
Acosta Arévalo falleció el pasado 29 de junio mientras se encontraba bajo custodia bajo custodia de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (DGCIM). Su muerte fue anunciada por el ministro de Comunicación e Información del régimen, Jorge Rodríguez, quien anunció que se haría “una completa y exhaustiva investigación para esclarecer el lamentable suceso”.
“Denunciamos la muerte sin sentido del capitán Acosta Arévalo a manos del régimen de Maduro. La agencia de contrainteligencia militar de Venezuela (DGCIM) es responsable de su tortura y muerte, junto a sus supervisores cubanos”, publicó Bolton en Twitter.
We denounce the senseless death of Captain Acosta Arevalo at the hands of the Maduro regime. Venezuela’s military counterintelligence agency (DGCIM) is responsible for his torture and death, along with its Cuban minders. https://t.co/VFsFjczP9i
— John Bolton (@AmbJohnBolton) 30 de junio de 2019
El capitán de corbeta había sido uno de los seis funcionarios apresados en medio de la visita que realizó entre el 19 y 21 de junio a la capital venezolana la Alta Comisionada de Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet.
Aunque las autoridades del régimen no han informado sobre las causas del deceso del oficial ni han entregado el cuerpo, el activista Alonso Medina Roa, miembro del equipo de defensa del militar, indicó a la agencia AP que hay evidencias de que Acosta Arévalo fue torturado por la policía política.
Fuentes anónimas confirmaron al activista que el capitán había llegado a los a los tribunales en silla de ruedas, presentando graves signos de tortura física.
El presunto asesinato del militar ha tenido una gran repercusión en el país suramericano y ha generado numerosas reacciones de activistas y opositores que exigen a los organismos internacionales pertinentes que actuar en el caso.