MIAMI, Estados Unidos – Dos años antes de que la nueva pandemia del coronavirus se expandiera por todo el mundo, funcionarios de la embajada de Estados Unidos en China enviaron dos advertencias oficiales a Washington sobre la seguridad inadecuada en un laboratorio de Wuhan que realizaba estudios riesgosos sobre el virus en murciélagos.
La información fue revelada este martes por el periodista de The Washington Post, Josh Rogin, quien reveló la existencia de los cables que confirman el hecho.
Según las comunicaciones, en enero de 2018 la embajada de EE.UU. en Beijing dio el paso inusual de enviar repetidamente diplomáticos científicos estadounidenses al Instituto de Virología de Wuhan (WIV), que en 2015 se convirtió en el primer laboratorio de China en lograr el más alto nivel de seguridad internacional en investigación biológica (conocido como BSL -4).
Según Rogin, lo que los funcionarios estadounidenses descubrieron durante sus visitas les preocupaba tanto que enviaron dos cables diplomáticos clasificados como sensibles, pero no clasificados de regreso a Washington.
Los cables recibidos habrían advertido sobre debilidades de seguridad y gestión en el laboratorio de WIV y propusieron más atención y ayuda.
“El primer cable, que obtuve, también advierte que el trabajo del laboratorio sobre coronavirus de murciélago y su posible transmisión humana representaba un riesgo de una nueva pandemia similar al SARS”, precisa el columnista.
La visita en 2018 fue dirigida por Jamison Fouss, el cónsul general de Wuhan, y Rick Switzer, consejero de medio ambiente, ciencia, tecnología y salud de la embajada.
“Durante las interacciones con los científicos en el laboratorio de WIV, los funcionarios notaron que el nuevo laboratorio tiene una grave escasez de técnicos e investigadores debidamente capacitados necesarios para operar este laboratorio de alta contención de manera segura”, indica el cable del 19 de enero de 2018, redactado por dos funcionarios de las secciones de medio ambiente, ciencia y salud de la embajada que se reunieron con los científicos de WIV.
Los cables recibidos por Rogin también advertían sobre las posibilidades de que un brote de coronavirus terminara una epidemia.
“Los investigadores también mostraron que varios coronavirus similares al SARS pueden interactuar con ACE2, el receptor humano identificado para el coronavirus del SARS. Este hallazgo sugiere que los coronavirus de los murciélagos similares al SARS pueden transmitirse a los humanos para causar enfermedades similares al SARS. Desde una perspectiva de salud pública, esto hace que la vigilancia continua de coronavirus similares al SARS en murciélagos y el estudio de la interfaz animal-humano sean críticos para la predicción y prevención de brotes de coronavirus emergentes en el futuro.”
Hasta ahora, el gobierno chino ha puesto un bloqueo total a la información relacionada con los orígenes del virus. Beijing aún no ha proporcionado a los expertos estadounidenses muestras del nuevo coronavirus recolectado de los primeros casos. El laboratorio de Shanghai que publicó el nuevo genoma del coronavirus el 11 de enero fue cerrado rápidamente por las autoridades por ‘rectificación’.
Asimismo, varios de los médicos y periodistas que informaron sobre la propagación desde el principio han desaparecido.
Si tienes familiares en Cuba comparte con ellos el siguiente link (descargar Psiphon), el VPN a través del cual tendrán acceso a toda la información de CubaNet. También puedes suscribirte a nuestro Boletín dando click aquí.