MIAMI, Estados Unidos. — El gobernante cubano Miguel Díaz-Canel lamentó la muerte del vocero oficialista Iroel Sánchez, fallecido este jueves en La Habana a los 58 años de edad.
El mandatario se hizo eco del suceso en redes sociales y calificó a Sánchez como “un modelo de revolucionario total”.
“La Revolución Cubana ha perdido hoy a un hijo que consagró a ella y al ideal socialista hasta sus últimas energías. Como intelectual infatigable, Iroel Sánchez deja una grande y valiosa obra y un modelo de revolucionario total. Abrazo sentido a la familia, compañeros y amigos”, escribió Díaz-Canel en su cuenta de Twitter.
La #RevoluciónCubana ha perdido hoy a un hijo que consagró a ella y al ideal socialista hasta sus últimas energías. Como intelectual infatigable, Iroel Sánchez deja una grande y valiosa obra y un modelo de revolucionario total. Abrazo sentido a la familia, compañeros y amigos. pic.twitter.com/78imKaX0np
— Miguel Díaz-Canel Bermúdez (@DiazCanelB) May 18, 2023
Debido a su rol dentro del aparato de censura del régimen cubano, Sánchez fue incluido en 2017 en la lista de “represores cubanos” de la Fundación para los Derechos Humanos en Cuba (FDHC).
Para esa organización, Sánchez era un activo “colaborador de la Sección 3 de la contrainteligencia del Ministerio del Interior, encargada de vigilar el sector cultural, artístico y académico en Cuba”.
En ese sentido, el vocero gozaba “del apoyo del Departamento Ideológico del Comité Central del Partido Comunista de Cuba que le permite el acceso a los medios de comunicación y cultura nacionales, todos bajo control estatal”.
La FDHC calificó en su momento a Iroel Sánchez como “otro mediocre perseguidor de ideas y talentos, asesino de reputaciones, dedicado a tronchar vidas y proyectos”.
Tras hacerse pública la noticia de su muerte, el dramaturgo cubano Yunior García Aguilera recordó en Twitter que Sánchez generaba fobias incluso dentro de sectores afines al castrismo.
“Ha muerto Iroel Sánchez, un talibán del castrismo, uno de los ideólogos y artífices más siniestros de la represión y la censura en Cuba. Iroel fue odiado, incluso, por la mayoría de los intelectuales y figuras de la cultura que aún simpatizan con el régimen”, sostuvo García Aguilera.