MIAMI, Estados Unidos. – Un informe de la Asociación Pro Libertad de Prensa (ALPL), organización sin fines de lucro con sede en La Habana, denuncia un aumento de la represión contra la prensa independiente por parte de la policía política del régimen.
De acuerdo con la información ofrecida, hasta el 22 de febrero, y en un lapso de menos de cien horas, cuatro periodistas fueron blanco de agresiones.
El día 17, en la terminal de Camagüey, a Ricardo Fernández Izaguirre, colaborador de “La Hora de Cuba” y “14ymedio”, le fue prohibido subir al ómnibus que lo llevaría a Santiago de Cuba. Además, arbitrariamente, permaneció varias horas bajo arresto.
El miércoles 18, en Pinar del Río, la policía allanó la vivienda de Yusleidy Romero, directora del medio de comunicación comunitario “Panorama Pinareño”, del Instituto Cubano por la Libertad de Prensa (ICLEP).
Esa misma jornada, la periodista de CubaNet Camila Acosta debió abandonar la vivienda donde vivía alquilada en La Habana debido a las presiones que sufriera la arrendadora por parte de agentes del Ministerio del Interior (MININT).
Dos días después, en horas de la noche, Julio Antonio Aleaga Pesant fue amenazado y citado a interrogatorio por alguien que se identificó vía telefónica como oficial de la Policía Política.
La Asociación Pro Libertad de Prensa advierte además sobre la gravedad de estos sucesos que, junto a las denuncias que aparecen en el informe correspondiente a enero de 2020, darían cuenta sobre el repunte de “una especie de cruzada contra la prensa independiente” por parte de dictadura.
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