Foto-reportaje de Ernesto García
LA HABANA, Cuba.- La Central de Trabajadores de Cuba, en el Teatro Lázaro Peña, festejó en la noche del sábado último el día Internacional de los Trabajadores, con una Gala Artística, previa a la marcha por el Primero de Mayo. La velada cultural estuvo presidida por Salvador Valdés Mesa, vicepresidente del Consejo de Estado y miembro del Buro Político del único partido que gobierna en Cuba, y Ulises Guilarte, actual secretario general de la central obrera cubana.
El espectáculo cultural dirigido a los sindicalistas e invitados estuvo a cargo de los grupos musicales Los Karachi, Mónica Mesa y su grupo, los Papines, Waldo Mendoza, los Guaracheros de Regla y la Compañía Danzaria Irene Rodríguez.
Un empleado de apellido Yero, de la empresa de mantenimiento y climatización en la capital habanera, manifestó: “la gente va más por coacción oficialista, que por el principio de voluntariedad. Fíjate, ya hicimos el ensayo del desfile, la Plaza esta lista”.
Continúa expresando el trabajador:
“La idea es que ellos dan al mundo una imagen, año tras año, pero esa no es la realidad del pueblo. Estos sindicatos son perores que los de antes de 1959, al menos luchaban más por los trabajadores, convocaban a protestas y los paros para mejorar nuestros salarios y nuestra vida. Ahora, cuidado, si te la buscas pierdes hasta el trabajo”.
Mientras en la Plaza de la Revolución los preparativos casi están terminados, en centros de trabajo y de estudios de la capital ya están pasando las listas de compromisos para saber quiénes participaran en el desfile y así presionar a la gente que no lo desee.
En el instituto preuniversitario Salvador Allende, en Boyeros, La Habana, ya hicieron los compromisos para la marcha obrera y estudiantil. También en la facultad de Medicina y en los hospitales William Soler y Dr. Enrique Cabrera Cossío.
Un estudiante del mencionado preuniversitario, que no quiso ser identificado manifestó a este reportero:
“No es la espontaneidad la que prevalece en estos desfiles, yo veo una razón política, más que de voluntariedad de la clase trabajadora, pues los sindicatos no convocan directamente, lo hace la Central de Trabajadores de Cuba, dirigida por el gobierno. Vamos a desfilar con consignas que ellos han elaborados, para que nosotros las pronunciemos en la plaza. Todo está dirigido”.