MIAMI, Estados Unidos.- Luego de que dos reporteros australianos abandonaran China por miedo a ser detenidos, el gobierno de ese país indicó que los periodistas extranjeros que trabajen en la nación asiática deben respetar las leyes locales, informaron varias agencias de prensa este martes.
Bill Birtles, corresponsal en Beijing de la cadena de televisión ABC, y Michael Smith, corresponsal en Shanghái de la Australian Financial Review (AFR), tuvieron que salir de territorio chino la noche del martes en medio de tensiones entre los dos países.
A su llegada a Australia Birtles comentó: “Es muy decepcionante tener que salir bajo estas circunstancias, pero es un alivio estar de vuelta en un país con un verdadero estado de derecho”.
Por su parte, el vocero de la diplomacia china, Zhao Lijian, dijo a la prensa que “mientras los periodistas extranjeros respeten la ley (…) no tienen razones para preocuparse”.
La salida de Smith y Birtles está relacionada a la investigación internacional que Canberra impulsó este año sobre el origen de la COVID-19, lo que ha dado paso a represalias comerciales del gigante asiático. Y según Marcus Strom, presidente de la Alianza Australiana de Medios y Entretenimiento (MEAA), se trata del “peor momento en las relaciones de la prensa extranjera con Beijing en casi 50 años”.
Las autoridades chinas expulsaron durante el primer semestre de 2020 a 17 periodistas extranjeros —número récord— al anular sus carnés de prensa, según el Club de los Corresponsales Extranjeros en China (FCCC). Así mismo, se penalizaron a los profesionales de la prensa, incluso con acreditaciones de más corta duración.
Al respecto, el FCCC denunció además que en las últimas semanas al menos cinco corresponsales extranjeros de cuatro medios estadounidenses (incluido Wall Street Journal, CNN y Bloomberg) no pudieron renovar su carné de prensa, indispensable para ejercer el periodismo.
Por su parte, la ministra australiana de Exteriores señaló que el Ejecutivo de Camberra sigue brindando ayuda consular a los ciudadanos australianos detenidos en China, entre ellos Cheng Lei, quien trabaja para el canal chino en inglés CGNT y que se encuentra detenida en una vivienda vigilada.
Cheng fue detenida el mes pasado, según el régimen chino, por motivos “de seguridad nacional”, una razón que hasta ahora no había sido comunicada por las autoridades.
“En cumplimiento de la ley, los servicios competentes tomaron medidas recientemente contra la ciudadana australiana Cheng Lei, sospechosa de actos criminales que ponen en peligro la seguridad nacional”, dijo el vocero Zhao.
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