LA HABANA, Cuba, 7 de diciembre (Eriberto Liranza, 173.203.82.38 ) -Lo que comenzó como una disputa entre adolescentes, terminó en uno de los más brutales asesinatos en la historia del reparto Eléctrico, en el capitalino municipio de Arroyo Naranjo.
El pasado sábado 3 de diciembre, después de una acalorada discusión, Jorge buscó una pistola artesanal, fabricada con un inyector de un motor, y efectuó un disparo contra sus agresores, esto provocó aun más la ira de los más de 20 jóvenes, que lo persiguieron para quitársela.
La víctima recibió 36 heridas, entre machetazos y puñaladas, y testigos presenciales declararon que nadie acudió a socorrer al joven debido al alto nivel de violencia que mostraban los agresores. El cuerpo sin vida de Jorge permaneció desde las 12 de la noche hasta las 4 de la madrugada, sobre un charco de sangre y lodo.
Cuando llegó la policía forense para llevarse el cuerpo, solo permanecieron en el lugar los vecinos de la zona acostumbrados ya a escenas como estas. “Cada fin de semana esta historia se repite, la violencia crece día a día y las autoridades no hacen nada, estos niños se están matando entre ellos”, dijo una vecina.
Según declaraciones de los mismos vecinos, los intestinos del joven salieron de su estomago y el rostro estaba irreconocible debido a las cortadas y los golpes. El índice de violencia en Arroyo Naranjo ha aumentado drásticamente entre los jóvenes en los últimos años, además del consumo de drogas y alcohol.
Hace pocos días un policía fue muerto por un disparo en el reparto La Güinera. En medio de una riña entre jóvenes, el policía sacó su pistola y disparó al aire para dispersar la multitud, pero otra persona respondió con otro disparo que le quitó la vida. La policía no ha podido capturar al responsable, a pesar de la gran cantidad de jóvenes que han sido detenidos e interrogados.