MIAMI, Estados Unidos. – El médico cubano Yoandris Sánchez Sánchez, especialista en Medicina General Integral (MGI) y ciudadano brasileño, denunció en una carta enviada a CiberCuba las trabas impuestas a los galenos de la Isla que “desertaron” inicialmente del programa Mais Médicos y ahora, tras su reapertura con la llegada al poder de Luiz Inácio Lula da Silva, esperaban reincorporarse.
Sánchez Sánchez denunció que los llamados médicos “desertores” por el régimen cubano no tienen acceso a la web de inscripción en el programa Mais Médicos.
“Sucedió que a nosotros ‘los desertores’ ―como nos cataloga Cuba―, entre la OPAS y el régimen cubano nos bloquearon la página de acceso para hacer la inscripción”, aseguró
“El Sistema Generalizado de Preferencias (SGP), que es una una web del Ministerio de Salud de Brasil, te dice que no cumples con los requisitos y que debes o llamar al 136 o enviar un correo electrónico a la dirección [email protected]”, continuó.
No obstante, el galeno especificó que cuando se opta por llamar los interesados pierden “más de una hora al teléfono” y no resuelven nada.
“Si escribes un correo te dicen ―como a mí― que fui desvinculado del programa por abandono y me colocaron una medida administrativa”, agregó.
“Pides explicaciones y no te saben decir nada. Los interesados por nuestra cuenta buscamos y encontramos procesos judiciales de años atrás que ni sabíamos que existían. En mi caso, por ejemplo tengo procesos del año 2021 y en aquel entonces yo estaba trabajando como asistente en una farmacia”, también contó.
Sánchez Sánchez consideró “un absurdo y una falta de respeto y ética que el gobierno cubano ―a pesar de uno encontrarse viviendo fuera― continúe con el yugo encima”.
El doctor cubano también aseguró que había presentado una denuncia por la vía judicial puesto que no tenía otra salida. “Estamos necesitando de apoyo internacional. Que el mundo sepa lo que está pasando en Brasil con nosotros, ‘los médicos desertores’”, terminó.
A inicios de este año el secretario de Atención Primaria del Ministerio de Salud de Brasil, Nésio Fernandes, dijo al diario Folha de Sao Paulo que su Gobierno retomaría el programa Mais Médicos, pero dando prioridad a los profesionales brasileños.
“La agenda para retomar Mais Médicos es inmediata. Queremos colocar médicos en todos los municipios brasileños en un corto período de tiempo”, dijo Fernandes.
También aseguró que no estaba previsto “repetir la colaboración con Cuba en las formas anteriores, con la participación de la Organización Panamericana de la Salud (OPS, brazo latinoamericano de la OMS)”.
A finales del pasado año, el senador brasileño Humberto Costa declaró a la prensa que el Gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva retomaría Mais Médicos.
“Hay médicos que se graduaron en el exterior y aún no han sido revalidados, hay médicos cubanos que se quedaron en Brasil y hay médicos que se graduaron y no están siendo absorbidos por el mercado laboral. Entonces, se podría implementar un programa similar, pero con predominio de médicos brasileños”, dijo el senador.
El programa Mais Médicos comenzó a implementarse en 2013, tras un acuerdo firmado por la entonces presidenta brasileña Dilma Rousseff y el régimen de la Isla, con la OPS como mediadora.
Cinco años después, en noviembre de 2018 La Habana decidió cancelar el acuerdo de cooperación con Brasil, por el cual más de 8000 médicos se encontraban en el gigante sudamericano, y retirar a todo el personal del programa Mais Médicos ante las condiciones impuestas por el entonces presidente Jair Bolsonaro.
El mandatario brasileño criticó las condiciones en las que los médicos cubanos se encontraban trabajando en su país y exigió al Gobierno cubano, con la promesa de mantener al personal, que los profesionales de la Isla recibieran íntegramente su salario, pudieran viajar a Brasil en compañía de su familia, y se sometieran a una prueba de reválida de sus títulos.
El régimen de La Habana decidió entonces retirar a sus trabajadores de la Salud de Brasil.
El Gobierno brasileño pagaba a Cuba 3000 dólares mensuales por cada médico en la “misión internacionalista”, sin embargo, los médicos cubanos solo recibían el 25% de sus salarios (unos 750 dólares). El resto, salvo un 5% que iba a manos de la OPS, terminaba en las arcas del régimen comunista de La Habana.