ARTEMISA, Cuba, 4 de abril (Moisés Leonardo Rodríguez, 173.203.82.38) – Una persona falleció y más de quince resultaron heridas, varias de ellas gravemente, cuando un ómnibus embistió a un grupo de personas en la calle central de Quiebra Hacha, provincia Artemisa.
Las víctimas estaban reunidas poco después de la medianoche del domingo pasado frente a una casa donde se celebraba una fiesta de quince.
“Yo conversaba con mi novia y, de repente, ella desapareció y en su lugar vi el ómnibus pasando delante de mí a toda velocidad, atropellando gente hasta detenerse cuando le gritaron que tenía un muerto debajo” aseguró un joven que pidió no ser identificado. Más tarde él encontró a su novia tirada en el piso con una herida muy grande y una fractura en una de las piernas que mostraba el hueso.
Otro de los jóvenes presentes, que tampoco se identificó, dijo que el ómnibus “iba a mucha velocidad y solo se detuvo después de atropellar a decenas de personas. Cuando le gritaron que tenía un muerto debajo, dio marcha atrás y estropeó a otros más que estaban tirados en la calle. Entonces la gente le cayó a pedradas al ómnibus para matar al conductor, quien huyó a toda marcha”.
Varios de los presentes lo persiguieron en automóviles, pero solo la policía pudo detener al chofer en Cabañas, municipio Mariel, y encarcelarlo.
En el lugar de los hechos falleció Víctor Daniel Martínez Regal, conocido como Macundo, de 38 años, natural de Cabañas, que residía en Quiebra Hacha junto a su esposa e hijo.
Dos niñas, de 12 y 13 años respectivamente, siguen en estado grave. A una de ellas habría que amputarle una o las dos piernas. Un hombre de 23 años se mantiene aun inconsciente por los traumas sufridos en la cabeza.
Ante la falta de opciones recreativas en lugares adecuados, se ha hecho habitual utilizar las calles como pistas de baile. Las personas que participan en cumpleaños, bodas y fiestas de quince vienen en muchas ocasiones de lugares lejanos sin ser invitadas a esas celebraciones, que perdieron su carácter íntimo desde años, cuando solo asistían familiares y allegados.
La prensa oficial, única permitida en el país, no ha informado del lamentable suceso, que tiene consternados a los residentes del municipio y de otros adyacentes.