LA HABANA, Cuba – Luego de que el presidente de Panamá, Juan Carlos Varela, anunciara a principios de septiembre la flexibilización para que ciudadanos cubanos puedan optar por la visa estampada (VE-2), dejando atrás la antigua regulación de visa restringida, cientos de personas han acudido al consulado istmeño, según un empleado del lugar.
Sin embargo, aún no está vigente el nuevo visado.
El mandatario Varela firmó un método expeditivo para el otorgamiento de visa VE-2, para que los cubanos puedan viajar al país istmeño con menos regulaciones que antes.
La VE-2 sólo será aprobada y editada por personal del consulado, que acreditará a funcionarios del Consejo de Seguridad Nacional (CSN) y del Servicio Nacional de Inmigración, quienes examinaran los requisitos de los solicitantes y sus antecedentes para estampar la visa. Esta será decidida por el cónsul istmeño en La Habana.
“Más de mil personas desde el pasado día 11 han acudido aquí para conocer sobre el nuevo tipo de visado que ofertara la embajada; todavía no podemos decir nada ya que la visa estampada no está vigente aún”, declaró un funcionario cubano que atiende al público en las afueras de la sede consular.
La VE-2 no requiere autorización previa de la Dirección de Migración, y los cubanos tendrían permisos de entradas y salidas múltiples al territorio de Panamá hasta por tres años. El anterior visado restringido permitía que los cubanos viajaran a aquel país sólo por varios meses.
“He estado llamando por tres días pero no hay forma de que cojan el teléfono, ahora vengo aquí y ellos [los funcionarios] no saben nada”, vociferaba un hombre frente al consulado.
Un anuncio fuera de ese edificio explica sobre el cambio de categoría del visado, de restringido a estampado, aclarando que todavía Panamá no tiene una política a seguir para iniciar los trámites pertinentes. También anuncia un teléfono y una dirección de correo electrónico para que acudan allí los interesados.
Cuba formaba parte junto a Haití y Surinam del reglamento de visa autorizada (VA-1) que exigía el gobierno de Panamá a países, por cuestiones relacionadas con su política migratoria.