LA HABANA, Cuba. – Antonio Font Carreño, vicepresidente de la asociación de cuentapropistas Pequeños y Medianos Empresarios en Cuba (PEMEMCUB), fue arrestado y amenazado por la Seguridad del Estado, con el fin de impedir que continúen con la iniciativa de ayudar a damnificados del tornado, que azotó a la capital cubana los días finales de enero.
Según comentó Antonio a CubaNet, el jueves en la tarde un oficial de la Seguridad del Estado se presentó en su domicilio, ubicado en el municipio Centro Habana, lo arrestó y lo condujo a la unidad policial de Zanja.
“Allí me tuvieron hasta tarde en la noche, porque según él que me arrestó, el jefe de él era quién quería interrogarme. Como nunca apareció, me soltaron y me dijeron que me presentara el viernes en la mañana”, explicó Antonio.
A las 9:00 am del viernes, Antonio volvió a presentarse en la unidad policial como le habían pedido. Allí fue interrogado y amenazado por un alto oficial de la contrainteligencia.
“Me aseguró que ya nosotros habíamos llegado a la línea roja y que no podíamos pasarnos. Por el mensaje que me transmitió, me hizo ver que ya teníamos un pie fuera y otro dentro de la prisión, porque lo que estábamos haciendo no podíamos hacerlo, que era un trabajo muy bueno, pero que el gobierno no iba a permitir nada de eso”, aseguró.
La pasada semana, PEMEMCUB lanzó una iniciativa con el fin de apoyar a los damnificados que perdieron sus casas tras el paso del tornado, que afectó más de 4800 viviendas de la capital.
La intención de la organización, partiendo de que cuentan con fuerza de trabajo para las labores de albañilería, carpintería, plomería, entre otros, era prestar estos servicios a la población afectada de manera gratuita.
“Esta es la única manera que nosotros tenemos de ayudar a estas personas, pero según este oficial, nosotros no podemos hacer eso, porque simplemente ellos no quieren, no sé porqué si esto que nosotros hacemos no tienen nada que ver con política, porque esto es un proyecto social”, enfatizó.
Durante el interrogatorio el oficial insistió en que ellos estaban siendo financiados desde los Estados Unidos, algo que, según señala Antonio, no es verdad.
“Tenían información falsa, porque nosotros no estamos siendo financiados por nadie, nosotros le brindamos ayuda propia a esas pobres personas que lo perdieron. La mano de obra, que es lo que desgraciadamente tenemos. Si tuviéramos algo más que ofrecerles, también lo haríamos”, insistió.
Antonio indica que el oficial le dijo incluso, que tenían conocimiento de que han hecho contacto con personas del exterior.
“Es cierto de que ha habido contactos, pero de ahí a financiarnos, eso sí no es cierto”, advirtió.
Por su parte Rodolfo Gregorych, presidente de la organización, refleja que, a pesar del acoso, no planean abandonar lo que están haciendo.
“Vamos a continuar con nuestro proyecto, intentaremos hacer algunos pequeños cambios y se lo vamos a presentar de nuevo a todas las instancias del gobierno, pero va a seguir siendo con el mismo fin”, puntualizó.