LA HABANA, 9 de diciembre (Manuel Guerra Pérez, 173.203.82.38 ) -La médica cubana Isnayana Cruz Hidalgo, abandonó la misión médica que cumplía en Venezuela, enviada por el gobierno cubano, según dieron a conocer en días recientes sus familiares, quienes declinaron dar detalles sobre su paradero actual.
Cruz Hidalgo, de 38 años, y natural de la provincia de Las Tunas, quien llevaba 2 años en Venezuela, abandonó el grupo de médicos cubanos que se mantienen en la nación sudamericana realizando la llamada Misión Barrio Adentro.
A pesar de la estrecha vigilancia que se mantiene sobre ellos, y las excelentes relaciones de cooperación existentes entre los gobiernos de Venezuela y Cuba, las “deserciones”, terminología militar utilizada por el gobierno cubano para referirse al abandono del puesto laboral de estos cooperantes “internacionalistas”, son frecuentes entre estos médicos desplegados en Venezuela.
El gobierno cubano cobra directamente a los gobiernos de esos países, en dólares o mercancías, los servicios que prestan estos cooperantes en Venezuela y otras naciones de América Latina, y paga a los médicos un estipendio que representa una fracción irrisoria de lo cobrado por sus servicios. Paradójicamente, muchos médicos cubanos ven en estas misiones una verdadera oportunidad, pues tienen la posibilidad de viajar al extranjero (para salir del país los cubanos requieren un permiso del gobierno que generalmente no es otorgado a profesionales de la salud, para evitar que abandonen la Isla). Además las “misiones” les posibilitan comprar artículos imposibles de adquirir en Cuba y ganar algún dinero adicional, ya que el salario promedio de un galeno en la Isla no sobrepasa los 40 dólares mensuales.
Esta lucrativa contratación o alquiler de mano de obra calificada constituye una importante fuente de divisas para la maltrecha economía cubana. Los cubanos se quejan, cada vez más, de la falta de médicos en los centros de salud del país y el descalabro general del sistema de salud nacional, debido a que decenas de miles de esos profesionales permanecen trabajando en el extranjero.