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CIENFUEGOS, Cuba – Tras cuatro días de actividades, el carnaval cienfueguero fue oficialmente clausurado ayer a la medianoche.
Según una nota aparecida en el diario local 5 de Septiembre, siete meses tomó a los promotores organizar el evento que, a decir de varios asistentes entrevistados, pasó sin pena ni gloria.
Aunque la parte cultural contó con agrupaciones musicales de primer nivel como Adalberto Álvarez y su Son, Elio Revé, o el cantante Will Campa, la mayoría de las presentaciones recayeron tanto en talentos locales como Arte Mixto o la Orquesta Revelación, como en miembros del movimiento de músicos aficionados.
El epicentro de los carnavales de la “Perla del Sur” fue en la llamada Plaza de Actos, donde el gobierno local ubicó a la mayoría de los centros recreativos y gastronómicos con que cuenta la ciudad para esta ocasión.
Emeregilda Fonseca, ama de casa, dice haber quedado decepcionada por las ofertas gastronómicas. Según ella, la mala calidad en la elaboración de los productos, junto a los elevados precios de su comercialización, empañaron la imagen de la fiesta.
Estos festejos se extendieron a los repartos de La Juanita, Junco Sur, Tulipán, Pastorita, Buena Vista, Pueblo Grifo y Caunao. Cada actividad contó con el apoyo de uno de los siete municipios de la provincia.
Los niños fueron los más agradecidos. El sector cuentapropista llevó sobre sus hombros la responsabilidad de satisfacer la demanda de entretenimiento de los más pequeños. Una rica gama conformada por artilugios mecánicos, coches tirados por chivos, toboganes, entre otros, hicieron las delicias de los niños.
Para las personas cuyas edades rebasan los cuarenta años de edad, los carnavales son la sombra de los que ellos vivieron durante su infancia y adolescencia. Para los jóvenes, quienes se reconocen desconocedores de la tradición y aseguran sentirse carentes de opciones recreativas, los carnavales aparecieron como una propuesta refrescante.
(Clemente Álvarez Díaz)