LA HABANA.- La actriz y periodista camagüeyana Iris Mariño fue despedida de la Academia de Artes Vicentina de la Torre, donde impartía la asignatura de Expresión Corporal y ha sido “regulada” por las autoridades, lo que le impide viajar fuera del país, informó ella misma.
Mariño ha anunciado un performance frente a la oficina del carnet de identidad de su municipio como protesta por esta decisión.
A principios de este año, los miembros de la publicación independiente La Hora de Cuba fueron notificados de que la causa bajo la que estaban siendo investigados, “usurpación de capacidad legal”, había sido “archivada”. Sin embargo, el acoso político se ha mantenido.
Iris Mariño ha sido una de las atacadas del equipo. Su casa fue allanada por fuerzas policiales y ahora es despedida de la Academia de Artes de Camagüey, según afirma sin motivos aparentes.
“A finales de febrero me pidieron que debía hacer un programa de 40 horas de clases que me quedaban por impartir, en un margen de 15 días”, cuenta Mariño que le dijo la jefa de cátedra, Gisela Sardiña.
Mariño apeló a esa decisión en la dirección de la escuela, “y me dijeron que era porque les hacía falta sus turnos de clases para la asignatura de actuación en la que estaban muy atrasados”, pero confirmó con sus alumnos que “la única asignatura que tuvo que cerrar fue la mía que, además, como no tiene revalorización, si el estudiante desaprueba tiene que irse de la escuela”.
Según Mariño la jefa de cátedra “se sorprendió porque ella ya había hablado conmigo y que no era necesario que fuera a la dirección a reclamar” por “el curso emergente” de Expresión Corporal que estaban obligándola a dar. En aquella reunión, de la que no sacó nada en claro, estaban la directora de la escuela María Mercedes García Vega y el especialista de teatro Nelson Acevedo, ambos cómplices del atropello.
“Ellos fueron muy sutiles”, cuenta le aseguraron de que el próximo curso volvería a ser contratada, pero la actriz tiene sus dudas y está segura de que no lo hicieron antes “porque se hubieran visto en una situación más difícil, ¿no? Pero ya al final del curso, cuando les quedan menos horas clases, es coser y cantar”.
Los estudiantes son los que más le preocupan.
“Como tuve que reorganizar el programa esos estudiantes tenían una situación familiar, no pudieron ir a clases y suspendieron”, explica. Aseguró que la Academia tomará alguna medida paliativa si no es que comienzan una “política de demonización” contra la profesora.
No obstante, habla de la reacción de “los desaprobados”. A esta situación de desempleo por sus ideas políticas se le suma la orden de no dejarla viajar fuera del país.
“Estoy presa en nuestro país. Hace un mes cuando me archivaron la causa yo no estaba regulada porque yo pasé por Inmigración y pregunté”, asegura. “Ahora voy a prorrogar el pasaporte y me encuentro que con que lo estoy”.
La actriz está siendo invitada a República Dominicana a un encuentro de activistas por los derechos humanos al que no podrá asistir, pero “voy a ir todos los días con un pullover que diga ‘soy regulada’”, y comenzará a convocar a otras personas que estén reguladas en la provincia de Camagüey para ver “¿qué pasa?”, anuncia y promete mantener actualizado su perfil en Facebook con la evolución de su acción plástica.
La reacción de la Academia de Artes en Camagüey se una a otras que hacen a las instituciones culturas oficialistas se mantengan en la vanguardia en materia de censura y represión en contra de los artistas que decidan mostrar otra versión de la realidad cubana.