Una vela para el miércoles

Moisés Leonardo Rodríguez

LA HABANA, Cuba, marzo (www.cubanet.org) - Los medios de difusión cubanos transmiten frecuentemente información sobre actos  realizados en terceros países en demanda de la liberación de los cinco espías cubanos presos en los Estados Unidos, al mismo tiempo que son reprimidos en Cuba los reclamos a favor de los presos políticos y de conciencia que cumplen condenas en las cárceles cubanas.

Una de las acciones cívicas que se desarrollan en la isla a favor de los condenados por sus posturas disidentes y opositoras se lleva a cabo los miércoles, generalmente en horas de la noche, en domicilios particulares.
Estas actividades, popularmente denominadas como La Vela, se inician con las notas del himno nacional  y una oración dirigida por uno de los participantes. Continúan con una referencia al presidio político, destacando los casos de presos en estado crítico debido a problemas de salud, o por huelgas de hambre u otras protestas que realizan contra las malas condiciones de reclusión que incluyen sistemáticos tratos inhumanos.
Uno de los lugares en que se efectúa La Vela desde hace dos años es el domicilio del presidente del Movimiento Línea Pacífica Democrática, Rodolfo Ramírez Cardoso.

Según declara el propio Rodolfo: “Durante el año 2008 fui sometido a detenciones arbitrarias y citaciones oficiales en 22 ocasiones con el evidente fin de impedir la realización de las actividades en mi casa”.

Casi todos los miércoles se pueden ver patrullas de la Policía Nacional, motos de la Seguridad del Estado y miembros de las brigadas de respuesta rápida en las inmediaciones para impedir  el arribo al domicilio de Cardoso.
Han sido frecuentes las detenciones de algunos de los que habitualmente participan, después de ser interceptados en la zona. Otros son citados oficialmente para los miércoles en la mañana desde días antes para alguna estación de la policía en las que lo mantienen hasta altas horas de la noche o incluso hasta el día siguiente.

Los reprimidos son miembros del movimiento que dirige Ramírez Cardoso y del Partido Pro Derechos Humanos de Cuba (afiliado a la Fundación Andrei Sajarov), principalmente su secretario nacional, Ricardo Rubén Barreto, y los activistas de dicho partido Sara Martha Fonseca, Máximo Roberto Fonseca, Juan Carlos Castellanos y Francisco Sá Fuster.

El gobierno cubano reprime constantemente los derechos a la libre expresión, reunión, y manifestación pacífica.

Como señaló nuestro Apóstol, José Martí: “Apena ver insistir en sus propios derechos a quien se niega a luchar por el derecho ajeno”.

¿Qué sentimiento causarían al Maestro los que se aprovechan a conveniencia del ejercicio del derecho ajeno y violan el de sus propios ciudadanos?