I ESPAÑOL I ENGLISH I CONTACTO I ¿QUIÉNES SOMOS? I NOTICIAS POR E-MAIL
 
 
________________________________________________

Algunas  respuestas  necesarias

Dra. Hilda Molina

BUENOS AIRES, Argentina, septiembre, www.cubanet.org -¡Qué penoso resulta que el gobierno cubano utilice los recursos económicos urgentemente imprescindibles para aliviar la asfixiante y deplorable situación del sufrido pueblo de la isla, en financiar a personas que tanto aquí en la Argentina como en cualquier lugar del mundo, se dedican a repetir las calumnias fabricadas por la poderosa Maquinaria Difamatoria del régimen contra los cubanos que aún expuestos a todos los peligros, nos atrevemos a criticar al tenebroso sistema implantado en mi Patria desde hace medio siglo!

A continuación, algunas respuestas necesarias dirigidas a los voceros internacionales a sueldo del gobierno cubano:

--Haciendo uso de mi inalienable derecho a la libertad de expresión, yo critico los conceptos y las actuaciones del régimen que en mi criterio afectan a mi país. Jamás he dirigido ofensas de índole personal ni familiar, ni siquiera contra los señores que torturaron durante más de quince años a mi familia y que además han devastado a mi Patria. Considero que los vulgares insultos personales y familiares de corte marginal, tan utilizados por los opresores de mi nación, son propios de aquellos que carecen de argumentos verdaderos para debatir sus opiniones en el plano de las ideas y de la decencia.

--Jamás he dañado ni con palabras ni con hechos a individuos de otras nacionalidades que se dedican a repetir las irracionales calumnias dictadas por el gobierno cubano. Ni conozco a esas personas ni ellas me conocen a mí. Obviamente se dedican a desarrollar, bastante torpemente por cierto, un pésimo y fácilmente descalificable libreto confeccionado por los opresores de Cuba.

--Cuando haciendo uso de mi indiscutible derecho a la libertad de expresión, expongo desde Cuba o desde cualquier lugar del mundo las terribles calamidades que padece mi Patria, lo hago basada en realidades que he vivido, evidentes, irrefutables, también planteadas por personalidades autorizadas como el Sr. Cardenal Jaime Ortega, y fácilmente comprobables con sólo una breve y bien intencionada visita al corazón sufriente de mi torturada isla.

--Desde mi llegada a la Argentina he informado por todos los medios posibles, incluido mi blog, que únicamente volveré a ejercer la Medicina para mis compatriotas y en mi propio país, cuando éste no sufra la opresión de un régimen que privilegia a los enfermos extranjeros y discrimina a los cubanos. Esto es fácilmente verificable. Aquí en la Argentina, he sido tan cuidadosa en el cumplimiento de las regulaciones establecidas, que he optado por ni siquiera corresponder a las múltiples y amables invitaciones recibidas para visitar instituciones médicas.

--No tengo que agradecer al gobierno cubano ni mi formación profesional, ni mi formación científica, ni la formación profesional y científica de mi hijo. En primer lugar, porque cuando los gobernantes vitalicios de Cuba llegaron al poder en 1959, yo contaba con una beca completa para estudiar Medicina en España o en Estados Unidos, beca ésta a la que renuncié porque creí en el proceso al que durante 35 años dediqué mi trabajo abnegado y honrado. En segundo lugar, porque al igual que muchos cubanos, yo he sido una explotada de ese régimen que cobró miles de USD por el trabajo que durante dos años desarrollé como neurocirujana en Argelia, y  por la labor de nuestro equipo en el Centro Internacional de Restauración Neurológica.

--Mi hijo efectuó hace muchos años la reválida de sus títulos con brillantes calificaciones, realidad ésta que puede ser verificado en la UBA y en el Colegio de Buenos Aires. Esto le permite a él, ya nacionalizado argentino, desempeñarse legalmente aquí en la Argentina como el profesional médico talentoso, ético, honrado, querido y respetado que es.

--La Restauración Neurológica, rama de las Neurociencias en la que me especialicé, no fue creada ni por mí ni por el gobierno cubano. Este importante campo neurocientífico surgió en países desarrollados gracias al trabajo inteligente y tesonero de brillantes científicos de esas naciones. Mi único modesto aporte fue introducir tempranamente en Cuba los logros de la Restauración Neurológica, contando siempre con la asesoría y la ayuda de sus creadores. Por tanto, el gobierno cubano no tiene ningún derecho a sentirse dueño de tales logros ni a actuar como controlador, gendarme, calumniador y hostigador internacional de los especialistas que decidan aplicar los principios de la Restauración Neurológica. Además, todo profesional calificado está en su absoluto derecho de aplicar en cualquier lugar del mundo estos principios que son patrimonio indiscutible de la Comunidad Científica Internacional.

--Yo procedo, nosotros procedemos de una familia ancestralmente honrada. Sucede que los ladrones siempre piensan que los demás también lo somos. Sucede que los que venden sus ideas, su pluma y su verbo a  una dictadura extranjera, piensan que los demás somos también capaces de vender nuestras conciencias. Ninguna mujer medianamente normal necesita que nadie le pague para reclamar a gritos el respeto de sus derechos familiares. Yo he defendido y seguiré defendiendo los derechos de mi familia. El hecho de que yo actualmente disfrute de mis derechos familiares violados durante más de 15 años, no invalida mi derecho a criticar los abusos de la   dictadura que oprime a MI PATRIA, en el lugar y en el momento que estime pertinente, Yo he criticado y seguiré criticando lo que considero que debo criticar a la dictadura implantada EN MI PAIS, dictadura ésta que por cierto se asoció en la Comisión de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra a la dictadura militar argentina para impedir que esa dictadura que tantos sufrimientos causó al noble pueblo argentino, fuera condenada por esa Comisión. Resulta sospechoso el fervor con que algunos extranjeros desautorizados defienden desde lejos a un régimen totalitario, estalinista y violador consuetudinario de libertades y derechos; y resulta más sospechoso aún que esgriman los mismos argumentos utilizados durante más de 50 años por el régimen para silenciar las voces de los que nos atrevemos a combatirlo pacíficamente.

--En el curso de los más de 15 años que duró la cruzada de mi familia en defensa de nuestros irrenunciables derechos familiares, contamos no sólo con el valiosísimo apoyo del pueblo, el gobierno y la prensa argentina; tuvimos además la extraordinaria ayuda de la Santa Sede, de gobiernos de otros países, de políticos, intelectuales, Premios Nobel del ámbito científico, prestigiosos científicos y personalidades en general de todo el orbe. Obviamente los bien informados dignatarios y las reconocidas y destacadas personas que en general nos brindaron su respaldo, jamás habrían ayudado y defendido a una familia que no mereciera tal ayuda; jamás habrían ayudado a una familia que no fuera dueña de una honradez y de una dignidad incuestionables.

--Las verdades que he expuesto sobre el drama que devasta a mi país son fácilmente comprobables. Si los empleados foráneos del gobierno cubano que ni siquiera me conocen y a los que nunca he ofendido quieren debatir sobre las realidades de Cuba, pues vamos a debatir pero sin insultos personales y en base a argumentos autorizados. Si los empleados extranjeros del gobierno cubano pueden probar sus calumnias, que lo hagan; de lo contrario que tengan el pudor de detener sus injurias pagadas,  y de suspender su defensa a un régimen tenebroso que ha llenado de dolor y de luto a mi Patria y que ha destrozado a las familias de mi torturada isla.

¡Bendito sea Dios!

Dra. Hilda Molina

Buenos Aires, 17 de septiembre del año 2009

 

 
Escriba una palabra clave o el tema
que desee buscar en las noticias o artículos publicados en Cubanet en español, inglés o francés
desde 1994 hasta 2009
 

___
 
___
 
___
 
___

 
http://www.cubanet.org/inicio_tienda.html ___

 
CubaNet no reclama exclusividad de sus colaboradores y autoriza la reproducción de este material siempre que se le reconozca como fuente.