: Cuba: ¿Para qué, otro llamado al debate en Cuba?
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¿Para qué, otro llamado al debate en Cuba?

Nelson Núñez Dorta

QUERÉTARO, México, septiembre, www.cubanet.org - Según reporta la AFP, “los cubanos iniciarán otro (¿nuevo?) debate de 45 días para analizar algunos de sus problemas y definir medidas de aumento de la producción, ahorro, eficiencia y lucha contra la corrupción, convocados por el gobierno de Raúl Castro”.

Traté de comprobar la noticia por otras fuentes, incluidas la prensa y la TV cubanas, pero no encontré nada sobre el tema; al parecer este llamado es más discreto y no pretende crear nuevamente las falsas expectativas de cambios de las convocatorias anteriores.
Quizás el “debate” se deba en esta ocasión, a que la vieja y moribunda cúpula desea tomar la temperatura actual ante las infinitas promesas incumplidas, las reiteradas demandas de sacrificio y el significativo aumento de la represión.

Pienso, que después de haber separado, deshonrosamente, de su sequito a los posibles renovadores, sin dudas existe inseguridad ante la convocatoria a un evento de envergadura como el indefinidamente pospuesto Congreso del Partido Comunista. El temor a los reformistas está presente y la gerontocracia desea morir disfrutando -ellos si pueden- de “las mieles del poder”

Estoy seguro que Fidel Castro no soportaría ser separado en vida de la mas alta dirección de su engendro político, y mucho menos que se diera un debate abierto y real, como hasta hoy  nunca ha ocurrido, sobre la modificación del curso de una dictadura que, cumpliendo instrucciones, apuntala su siempre fiel hermano.

Para que así sea, se anuncia que no faltará entre los temas  priorizados por las autoridades la "decisión irrenunciable de construir el socialismo", tal y como lo recoge la Constitución de la República. Recordemos que Raúl Castro anunció una nueva postergación del VI Congreso del PCC, que debió celebrarse en 2002, al señalar que se requiere más tiempo y elementos para diseñar un nuevo "modelo de socialismo".

Resulta absurdo y contradictorio, que a estas alturas se hablé de construir un nuevo modelo de socialismo, cuando es la gerontocracia dogmática e inmovilista la que se reserva el derecho de dirigir y controlar ese proceso, asegurándose así de que no peligre su permanencia vitalicia en el poder. Son ellos los que se consideran protectores de los cincuenta años de fracasos de un modelo que llaman Revolución Socialista, pero que realmente debería llamarse “Caprichos Castristas”.

La realidad, es que el pueblo cubano sigue girando en la noria sin llegar a ver la respuesta efectiva  a sus millones de planteamientos y la solución de sus graves  problemas, que han sido expuestos hasta la saciedad y son mas que conocidos por la dirigencia del régimen.

Estos ejercicios y amagos de cambio, solamente sirven para perder tiempo; un tiempo que ganan y aprovechan muy bien  los encumbrados dirigentes históricos, a quienes no parece realmente importarle el futuro del país, pero sí, y mucho, el garantizarse desde el poder un final espectacular, que consideran les corresponde, con duelos, tributos, honores y exequias especiales en mausoleos creados exclusivamente para ellos. Hasta después de muertos desean permanecer distantes y muy por encima del pueblo cubano.

 

 

 
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