12 de mayo de 2008   IMPRIMIR   VOLVER AL INICIO
 
CRÓNICA
 

Un paraíso verde

Miguel Iturria Savón

LA HABANA, Cuba, mayo (www.cubanet.org) - Si las tonalidades de las aguas de Varadero pintan el azul, y el blanco se percibe en su extensa franja de arenas finas, el Parque Josone salpica con el verde de sus plantas al balneario turístico más importante de Cuba.

Hace unos años, al descubrir ese paraíso verde en el infinito azul de Varadero, me sorprendieron su nombre y el estilo vizcaíno de una de sus casas y de la cerca perimetral. Supe después que se trataba del complejo residencial y de descanso de José Fermín Iturrioz y Llaguno (Cárdenas, 1890-New York, 1969), uno de los directivos más eficaces de la industria cubana, quien ejerció entre 1926 y 1956 como Director General de Arechabala S.A., empresa de gran contribución al desarrollo técnico,  productivo y comercial del país.

Las residencias de Iturrioz, expropiadas y convertidas en centros de recreo del gobierno revolucionario, actual Parque Josone, deben su apelativo a las tres primeras letras de su nombre (José) y al de su esposa (Onelia). Allí se hospedaron los huéspedes más ilustres del director de Arechabala. Años después estuvo al servicio de Fidel Castro, quien alojó, entre otros, al mandatario ruso Leonid Brezhnev y al presidente de Chile Salvador Allende.

Josone es un área recreativa y habitacional, edificada por Iturrioz entre 1935 y 1950, en los terrenos comprados en la Laguna de la Paz. Tanto El Retiro como La Cabaña y el resto de las construcciones articuladas entre sí y delimitadas por una cerca perimetral de piedras, fusionan los elementos típicos del caserío vizcaíno con la mansión de descanso de la burguesía criolla. José Iturrioz era hijo de un vasco y una cubana.

Los turistas que entran a Josone pueden pasear por sus ocho hectáreas y apreciar la reserva de su flora y su fauna, llena de laureles, sauces, ceibas, cocoteros, mangos y flamboyanes de intenso verdor, que cobijan bajo la sombra o en las aguas de sus lagos a patos, pavos reales, quiquiritas y especies representadas por el guacamayo Pancho, mascota del parque, que pertenece a la compañía turística Palmares, del Grupo Cubanacán del Ministerio de Turismo de Cuba.

Entre las edificaciones recicladas como restaurantes, hallamos El Retiro, mansión neoclásica de la familia Iturrioz, que ofrece langosta con vegetales y varios platos de la cocina internacional; mientras, en la casa ubicada frente a la Laguna de la Paz está El Dante, especializado en gastronomía italiana. Más abajo, en la cabaña de cantería que recuerda al caserío vizcaíno de su padre, se ubica La Campana, con ofertas de comida criolla.

El resto son la piscina, el bar La guarapera, Varadero 1920, el Parque de los enamorados, El Túnel, La arboleda y el Jardín de Celia, en honor a la secretaria personal de Fidel Castro, quienes expropiaron al gran empresario y lo obligaron a marcharse del país.

El Parque Josone, como la residencia de Dupont y de tantos cubanos y extranjeros expulsados por la intolerancia de los hermanos Castro, no es un lugar para “el disfrute del pueblo”, sino de una minoría gubernamental y de los turistas que buscan un paraíso verde en el infinito azul de Varadero.

 

 

 

 
 
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