La moda quedó sin rey


LA HABANA, Cuba, 3 de junio (Lucas Garve, Fundación por la Libertad de Expresión / www.cubanet.org) - Ha muerto Yves Saint Laurent. El mundo de la moda quedó sin rey. Y no ha surgido un delfín que pueda ocupar el trono heredado de Chanel y Dior. Tendremos que esperar que surja otro genio creador como Saint Laurent para que la elegancia vuelva a salir a la calle, sin estridencias, sin exhibicionismo, simplemente la esencia de la elegancia.

El Prêt-à-Porter  lo hizo llegar al alcance de casi todos. Aquí en Cuba, la “griffe” YSL es mas conocida que el rostro del fallecido creador. Un Saint Laurent pronunciado de mil formas viste más que la prenda que se lleva con más, menos o ninguna distinción. Es la marca la que viste. Entre los jóvenes un t-shirt YSL es una prenda de lujo. Saint Laurent se convirtió en el escaparate de los años 60 y 70. El famoso desnudo para acompañar la publicidad de uno de sus perfumes lo elevó a la categoría de icono.

Recuerdo una noche de los 80 cuando una amiga se roció el perfume Opium para invadir el salón de un cabaret habanero. Ella tuvo esa noche sus 15 minutos de fama. Nunca durmió tan bien.

Aún no dejo de agradecer a un entrañable amigo, fallecido en el exilio, que me hizo llegar el preciado regalo de un frasco del perfume Rive Gauche en una época en que expandir el aroma de un perfume de esa línea era un atentado al igualitarismo.

Voltaire  sentenció en una ocasión que lo superfluo no era imprescindible, pero sí necesario, por ser bello. Yves Saint Laurent fue un creador de belleza. Por tanto, sus obras marcaron pauta en la cultura del estilo y la línea.