Salud pública
cubana
Pésimo
el servicio estomatológico en Arroyo Naranjo
LA HABANA, 4 de febrero (Juan Carlos Linares Balmaceda, Cuba-Verdad
www.cubanenet.org) - Los residentes en el capitalino municipio de Arroyo
Naranjo carecen parcial y en ocasiones hasta totalmente de servicios de
estomatología.
La clínica estomatológica de Párraga, enclavada en el
barrio del mismo nombre, en calle Santa Fe y Estrella, no brinda atención
desde hace más de ocho meses, debido a una tupición en las tuberías
albañales que no se sabe cuándo será reparada.
Por su parte, el policlínico Capri tiene roto el compresor de aire,
por lo que tampoco está ofreciendo servicios estomatológicos desde
hace más de un mes. "Aquí sólo se están
atendiendo los servicios de urgencias porque contamos con un solo sillón
dental", informó por teléfono una empleada. Esta clínica
está en Calzada de Bejucal y A. López, en la barriada del Carpi.
En la clínica de Managua, en la Calzada de Managua No. 1056, sólo
se realizan cuatro extracciones diarias, y los demás servicios están
muy limitados también, declararon pacientes y empleados de la clínica.
"Para sacarme una muela tuve que hacer una cola toda la noche", comentó
un paciente.
Tampoco los dispensarios dentales del vecino municipio 10 de Octubre brindan
un buen servicio. La clínica Luis A. Turcios Lima situada en la calle
Santa Catalina No. 751, en la Víbora, desde hace varios días no
realiza extracciones por déficit de anestesia y sólo tiene
disponible un sillón para las urgencias. También estuvo paralizada
el jueves y el viernes la clínica estomatológica de la calle 10 de
Octubre y Poey, por razones desconocidas.
Otro motivo de quejas por parte de los usuarios es el deficiente servicio
telefónico con que cuentan estas clínicas, las cuales casi siempre
tienen sus líneas ocupadas o fuera de servicio, por lo que en muchas
ocasiones los pacientes están obligados a acudir personalmente a estos
sitios para indagar si están o no funcionando, a pesar del deficiente
transporte público.
El gobierno prohíbe a los médicos y dentistas graduados después
del año 1959 ejercer cualquier especialidad de forma privada o en sus
casas. Sólo unas pocas pequeñas clínicas privadas existen
en la capital y en el resto del país, pero muchos estomatólogos,
para incrementar el salario que paga el estado, cuentan con una clientela que
atiende en las propios clínicas estatales.
La extracción, el empaste o la limpieza de las piezas cuestan cada
una un promedio de un dólar o su equivalente en moneda nacional.
Esta información ha sido transmitida por teléfono,
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