El Nuevo
Herald, septiembre 9, 2002.
Sep. 08
Comienza el censo
Efe. La Habana
Luego de 21 años sin emprender un estudio de su demografía,
Cuba comenzó ayer un Censo de Población y Viviendas que consultará
a cada uno de sus habitantes para saber cuántos y cómo son, dónde
y cómo viven, y qué hacen.
Más de 100,000 personas han trabajado en su organización y
76,425 enumeradores (encuestadores), en su mayoría estudiantes
universitarios, iniciaron ayer las visitas a más de 3,4 millones de
domicilios, según datos de los organizadores.
Los enumeradores y supervisores voluntarios, que visten camisetas blancas y
rojas, estampadas por delante con el logotipo del Censo y por detrás con
el lema ''Cuba cuenta'', extenderán su trabajo hasta el día 16.
Pero los organizadores dijeron que esperan reflejar las primeras
informaciones en las próximas horas.
Su labor consiste en recoger en cada vivienda las respuestas a 14 preguntas
sobre los domicilios, como su construcción, materiales, cantidad de
piezas, si tienen instalación de agua o electrodomésticos, etc.
Otras 21 preguntas se refieren a datos de las personas que la habitan, como
edad, raza, sexo, nivel de educación, ocupación laboral, oficio,
estado civil y si padecen enfermedades.
Las autoridades de la isla han insistido en señalar la importancia de
este censo, porque consideran que permitirá actualizar datos para
elaborar con mayor precisión futuros programas sociales y conocer con
exactitud las inversiones requeridas.
El propio gobernante, Fidel Castro, dijo que el Censo ``será una guía
para los programas sociales que van creciendo en el país''.
El gobierno cubano ha destinado un presupuesto de más de 40 millones
de pesos (un peso equivale a un dólar al cambio oficial) y cerca de 6
millones de dólares, según informó la prensa local.
El director nacional del Censo, Juan Carlos Alfonso, declaró que
``toda la información se obtiene por declaración. No presentamos
ni pedimos ninguna información legal''.
El primer censo cubano data de 1774, en la época colonial y cuando
apenas habitaban la isla 171,620 personas,
Embajador mexicano bajo investigación
Pablo Alfonso.
La noticia de que el embajador de México en Cuba, Ricardo Pascoe, está
siendo investigado por supuestas irregularidades en el manejo de gastos de la
sede diplomática mexicana en La Habana, ha causado disgusto en la
cancillería castrista y en las altas esferas del poder en la isla.
A fin de cuentas, Pascoe, un ferviente izquierdista de origen troskista, que
no se oculta para manifestar su admiración por Fidel Castro, es
considerado un amigo por la dictadura cubana.
El anuncio de la investigación lo hizo el jueves en ciudad México,
el oficial mayor del ministerio de Relaciones Exteriores, Mauricio Toussaint,
quien explicó que el proceso lo conduce la Contraloría, órgano
encargado de la vigilancia administrativa del Estado, por presuntos manejos
financieros irregulares.
Según Toussaint, la Contraloría realizó una auditoría
a la sede diplomática en La Habana que concluyó con algunas
''observaciones'' referentes a la no comprobación de gastos o al
''faltante'' de recursos.
''Las auditorías las hace Secodam (Secretaría de la Contraloría),
lo que ha hecho es enviar un inspector, un supervisor, que están
verificando algunos gastos, pero es un procedimiento que todavía no se
resuelve'', agregó Toussaint, durante una conferencia de prensa. ''Hasta
ahora lo que único tenemos es un pliego de observaciones donde se
formulan solicitudes de explicación por algunos faltantes o por
comprobación no debida de gastos en la embajada en La Habana'', añadió
el funcionario.
Aunque se trata de un problema de naturaleza interna de las instituciones
mexicanas, sin dudas esa investigación es interpretada en La Habana como
otro jarro de agua fría a las ya casi congeladas relaciones entre México
y Cuba.
Pascoe, ha tenido diferendos públicos con el canciller, Jorge Castañeda,
sobre la política mexicana hacia la dictadura cubana. A principios de
este año Castañeda, se convirtió en blanco de fuertes críticas
de La Habana, por sus señalamientos sobre la situación de los
derechos humanos en Cuba.
La investigación contra Pascoe coincidió con el rechazo del
Gobierno de México a la oferta que hizo un grupo de empresarios para
pagar la celebración de las fiestas patrias de México en La
Habana, en vista de que la cancillería mexicana informó que no
dispone de fondos suficientes este año para celebrar esos festejos, los
cuales han sido suspendidos en la mayoría de sus embajadas en el
exterior.
''Nos podrían cobrar el favor'', argumentó Toussaint, al
explicar las razones de la negativa oficial.
Por lo pronto, Castro ha cancelado su esperada visita a Gudalajara para
asistir a la Feria Internacional de Libro, programada para noviembre y que este
año estará dedicada a Cuba.
Según el diario mexicano La Jornada, estas cuestiones podrían
estar en el trasfondo de esa cancelación, a las quehabría que añadir
las dificultades que ha encontrado este año la habitual reunión de
parlamentarios de ambos países. El evento previsto para los primeros días
de agosto se ha venido postergando por cuestiones de agenda aunque parece que,
finalmente, tendrá lugar a fines de este mes.
''El suceso provocó tal malestar entre las autoridades de La Habana,
que algunos legisladores mexicanos fueron informados que el comandante Castro
había decidido no acudir a la FIL de Guadalajara, y en su lugar lo
representaría el ministro de Cultura, Abel Prieto, quien estará
acompañado del historiador Eusebio Leal, Armando Hart, Silvio Rodríguez,
escritores, bailarines e intelectuales'', afirmó La Jornada.
E-mail:palfonso@herald.com
Tres años de confrontar con el gobierno
Marie Sanz / Afp. La Habana
'' Buen viaje, Sra. Huddleston'': los títulos irónicos de la
prensa cubana no dejan lugar a dudas sobre la animosidad del gobierno de Fidel
Castro hacia Vicki Huddleston, responsable de los Intereses estadounidenses en
Cuba, quien deja La Habana este fin de semana tras tres agitados años al
frente de uno de los puestos más sensibles de la diplomacia
norteamericana.
''Creo que ellos están contentos de que me vaya, me pondrían
una alfombra roja en el aeropuerto'', bromeó en una entrevista con la AFP
esta sonriente mujer de 59 años, pequeña, delgada y elegante, pero
que no por ello deja de personificar para el régimen cubano a un
formidable adversario.
Entre tensiones bilaterales, la zaga político-judicial del niño
Elian, la visita de Jimmy Carter -el más alto funcionario estadounidense
que pisó suelo cubano desde el triunfo de la revolución en 1959-
las reuniones con disidentes y las visitas de delegaciones norteamericanas de
todo tipo, Vicki Huddleston estima que su misión en Cuba será para
ella ``inolvidable''.
Desde el balcón del impresionante inmueble de hormigón y
vidrio que alberga la Sección de Intereses Estadounidenses sobre el Malecón
de La Habana, ella ha visto desfilar a millones de cubanos durante las más
importantes manifestaciones antiestadounidenses de los últimos años.
En los jardines de su suntuosa mansión de estilo colonial, ella
organizó recepciones de más de 500 personas donde por primera vez
fueron invitados dirigentes de toda la disidencia cubana.
Representar a Estados Unidos en Cuba, dos países que no tienen
relaciones desde hace más de 40 años y que sólo tienen
oficinas de representación -la sección de Intereses- desde 1977,
es una empresa difícil, pero la diplomática norteamericana, al
contrario que sus predecesores que adoptaron un perfil bajo, no dudó en
criticar abiertamente al gobierno del gobernante Fidel Castro.
Sep. 07
Vicky Huddleston llama a apoyar los cambios
Agence France Presse. La Habana
La jefa de la Sección de Intereses de EU en Cuba, Vicky Huddleston,
elogió ayer la labor desarrollada en los últimos años por
la disidencia interna en Cuba y exhortó a la comunidad internacional a
trabajar por una transición pacífica hacia la democracia en la
isla comunista.
''En mis tres años de gestión aquí he notado un
crecimiento notable en la oposición interna, que realiza un gran trabajo
en materia de vigilancia de los Derechos Humanos y en fomentar el desarrollo de
la sociedad civil'', dijo Huddleston.
''Creo que pude haber contribuido en una pequeña forma a centrar la
atención en la situación de los derechos humanos'', agregó
la diplomática, quien arribó a la isla en septiembre de 1999.
La diplomática, jefa de la Sección de Intereses de Estados
Unidos en Cuba, oficina que cumple funciones de enlace entre ambas naciones, sin
relaciones desde hace más de 40 años, culmina este mes su labor en
la isla tras ser designada como embajadora en la República de Mali, en
Africa.
De 59 años de edad, Huddleston fue una crítica permanente del
gobierno de Fidel Castro, al que le ha reclamado públicamente que
promueva una apertura política y permita el libre accionar de sus
opositores.
''Las Organizaciones No Gubernamentales y los gobiernos deberían
tratar de apoyar más a los disidentes cubanos, siempre en una forma legítima,
así como se hizo con los países de Europa del Este'', dijo la
diplomática al demandar un mayor protagonismo de la comunidad
internacional respecto a la situación en Cuba.
Consideró que en la isla ya se vive un momento de transición,
a pesar del inmovilismo que quiere imponer el gobierno a la sociedad, y advirtió
que ''no puede haber castrismo sin Fidel Castro'', al ser consultada sobre las
perspectivas políticas en el futuro de Cuba.
Huddleston afirmó que el Proyecto Varela, una iniciativa disidente
que promovió la convocatoria a un referéndum para modificar leyes
electorales y exigir la libertad de presos políticos, ``marcó uno
de los momentos más importantes de la historia cubana reciente''.
''La respuesta del gobierno de Castro fue drástica, pero le hizo
perder credibilidad ante la comunidad internacional'', precisó la diplomática
y reiteró su pedido de apoyar a los opositores que operan en Cuba.
''Hay una generación de cubanos que está pidiendo cambios y
hay que apoyarlos. Hay que fomentar una transición pacífica'' que
permita una salida ordenada al sistema socialista, vigente en la isla desde hace
43 años, agregó.
Huddleston negó las acusaciones oficiales sobre el presunto
financiamiento de la disidencia por parte de los diplomáticos
estadounidenses acreditados en la isla y afirmó que esa ''es una mentira
del Estado'' cubano.
''Los disidentes trabajan por sus ideas y sus creencias, no por un sueldo
que le podamos pagar nosotros. Nunca les hice siquiera una sugerencia'', enfatizó
la diplomática.
Luego de señalar que se retiraba conforme con el trabajo realizado en
los últimos tres años, donde tuvo que enfrentar desde la crisis
generada en 1999 por la zaga judicial del niño Elián González
y la visita del ex presidente Jimmy Carter, en mayo pasado, Huddleston dijo que
no se lleva ``malos recuerdos de La Habana''.
''En un futuro, con democracia, Cuba será el motor económico
del Caribe'', indicó la diplomática.
Creen que la apertura necesita ser paulatina
Efe. San Lorenzo, España
España desea la aplicación paulatina de reformas políticas
y económicas en Cuba como mejor vía para el inicio de una transición
democrática en la isla.
El subdirector general para la ONU del Ministerio de Asuntos Exteriores de
España, Rafael Dezcallar, afirmó el viernes que ``Cuba está
anormalmente empobrecida ya que su situación nunca fue comparable con el
resto de los países de la región''.
En una ponencia titulada ''Las opciones de Cuba'', dentro de un seminario
impartido en los cursos de verano de la Universidad Complutense en San Lorenzo
de El Escorial (Madrid), Dezcallar opinó que, a pesar del aparente
inmovilismo, el país vive una transición porque ``la revolución
es un proyecto agotado ya que pocas personas apuestan por que la situación
actual pueda continuar''.
A criterio de Dezcallar, que vivió en Cuba desde 1992 hasta 1995,
existen cuatro opciones de salida del régimen castrista.
La primera podría ser una reafirmación de la ideología
totalitaria, pero Dezcallar la desecha porque para que eso ocurra ``hace falta
un líder con un carisma y la voluntad implacable que sólo tiene
Fidel Castro''.
También descartó la posibilidad de una revuelta popular
porque, a diferencia de lo que sucedió en Rumanía, el comunismo en
la isla caribeña no se impuso desde fuera y no hay suficiente unidad
interna como para que esto ocurra.
Expresó temor por una alternativa que denominó como
''pendular'' que se trata de la negación o demonización del
sistema actual.
''Cuba quedaría demasiado expuesta y vulnerable al abrirse al mundo
de una forma indiscriminada porque, paradójicamente, la revolución
que surgió para fortalecerla frente a Estados Unidos la debilitó'',
dijo Dezcallar.
Para el funcionario, el ingreso repentino de Cuba a un sistema capitalista
podría provocar una devastación a causa de la omnipresencia actual
del Estado y la dificultad que la población tendría ``de hacer
frente las exigencias de la economía de mercado''.
Por ello Dezcallar se inclina por una apertura moderada en la que
colaborasen todos los sectores de la sociedad. |