Yupi
Internet, octubre 17, 2002.
California exportará uvas pasas a Cuba por primera vez en 40 años
San Diego, 17 Oct (Notimex).- Agroindustriales de California reanudarán
este mes sus exportaciones a Cuba, suspendidas por más de 40 años,
con un embarque de cien toneladas de uvas pasas, que según las normas del
gobierno estadounidense deberá ser pagado en efectivo.
La vicepresidenta de ventas internacionales de la compañía
Sun-Made, Stefany Kaercher, confirmó que el pedido se acordó
durante una plática privada que empresarios de California sostuvieron con
el presidente cubano Fidel Castro en La Habana en septiembre pasado.
"Estimamos que el mercado cubano es similar al de República
Dominicana, donde el año pasado vendimos cerca de 700 toneladas de uvas
pasas", dijo la ejecutiva de California Sun-Made Raisings, una empresa
especializada en esa fruta seca.
Estimó que otros agroindustriales de California que también
participaron en la Exhibición de Productos Agrícolas y de
Alimentos de Estados Unidos en La Habana, del 26 al 30 de septiembre pasado,
también podrían reiniciar en breve las ventas a la isla.
Entre otras firmas, acudieron a la exposición la vinícola
Ernest and Julio Gallo, la Comisión de la Uva de Mesa de California -que
aglutina a empresarios de Valle Central, Sacramento y Napa-, de La Compañía
de Arroz, y Productos del campo industrializados Melisa.
Kaercher dijo que el embarque de uvas pasas saldrá a finales de
octubre y llegará a Cuba en diciembre próximo.
El contrato establece un pago de 200 mil dólares por parte del
gobierno de La Habana, y estipula que el producto de los empresarios del Valle
Central de California se apegue a los reglamentos cubanos de seguridad y
sanidad.
Una directiva de la Comisión de la Uva de Mesa de California, Judy
Hirigoyen, informó que los productores californianos "buscan
desesperadamente nuevos mercados para exportación, y Cuba es una de las
alternativas para colocar los productos".
Hirigoyen, quien por su dominio del español sirvió como enlace
entre empresarios de California y funcionarios de la oficina de importación
de alimentos de Cuba Alimport, consideró que las exportaciones a La
Habana aumentarán en el futuro.
"Desde el punto de vista empresarial, Cuba es un mercado que tiene
mucho sentido", señaló la representante.
Luego de 40 años de embargo estadundiense a Cuba, el Congreso aprobó
en el año 2000 una iniciativa que autoriza las exportaciones de alimentos
y medicinas al mercado cubano, a condición de que se paguen en efectivo.
En California, uno de los grupos agrícolas que ha expresado mayor
interés en exportar a Cuba es La Compañía de Arroz del
valle de Sacramento, cuyo mercado principal es Asia, que sin embargo, hasta el
miércoles permanecía sin informar si comerciará con La
Habana.
Navarro cuenta la historia de sus compatriotas en un libro
Por Yanet Aguilar Sosa
México, 17 Oct (Notimex).- La finalidad principal del escritor
Osvaldo Navarro, de Cuba, con su novela "Hijos de Saturno", era contar
una historia que representara una época o a los hombres de un tiempo, "los
cubanos, tanto los que se quedaron dentro de la isla, como los que salimos somos
hijos de Saturno, somos parte de una gran tragedia".
Editada por "Debate", la novela de Navarro habla de los cubanos
que vivieron en los últimos 50 años una gran tragedia al estilo
griego, según él, y se presentará este jueves en la sala
Manuel M. Ponce, del Palacio de Bellas Artes, y en noviembre, en Miami, Estados
Unidos.
"Equivocamos nuestro destino como Nación, nos metimos al
comunismo, al absolutismo de un régimen que no tenía que ver con
la revolución que hicimos nosotros con buena voluntad, ni con la
democracia", señaló a Notimex, el escritor y periodista,
quien vive en México desde 1993.
"Esta no es una novela de ciencia ficción, se sustenta en hechos
históricos muy elementales porque no me interesaba contar la historia,
ese es un asunto de los historiadores, a mi me tocaba contar el drama, la
tragedia de una generación que en el fondo es también la tragedia
de las generaciones posteriores en Cuba", señaló.
Navarro dijo además que la historia está como telón de
fondo, pues no es una novela histórica propiamente, es una novela
enmarcada en un tiempo de la historia de Cuba, entre 1936 y 2000, en
determinados lugares de la isla, como son las montañas del Escambray y
las ciudades Trinidad, Cienfuegos y La Habana.
Entre personajes reales y creados por la ficción de Navarro,
transcurre la novela. Estaquio de la Peña se mueve entre una prostituta
como personaje de ficción y Fulgencio Batista como figura real, a partir
de ahí se empieza a desarrollar la historia.
El general Batista fue derrotado el primero de enero de 1959 por Fidel
Castro Ruz, quien desde ese entonces se mantiene en el poder en Cuba.
"Cuando pensé en el personaje central me interesaba que tuviera
una evolución, por lo que me interesó situarlo en la parte central
de Cuba, donde sucedieron cosas históricas, ahí estuvo un
sanatorio de tuberculosos y fue real que Batista estuvo ahí para fundar
ese sanatorio en 1936", aseveró.
"Batista es un personaje que tiene mucho que ver con la historia cubana
del siglo XX, por eso es un personaje que aparece en la novela", dijo.
A Navarro le interesaba el año de 1936 porque ese año se
conoció el fracaso de la revolución del 30 en Cuba y en ese tiempo
surge la figura de Batista.
Por eso pone a Estaqui de la Peña, su personaje central, como un
adolescente que comienza a interesarse en las cuestiones del ejército,
lucha en él y luego lo enfrenta desde la revolución con Fidel
Castro y otros.
"Este personaje necesitaba que evolucionara así, el personaje no
se sabe bien en qué momento desaparece, pero la novela sí concluye
en el año 2000, cuando el hijo de Estaquio termina la propia historia que
su padre estaba escribiendo", señaló el también autor
de la novela testimonio "El caballo de Mayaguara".
Su novela, que se desarrolla como una autobiografía de Estaquio de la
Peña, contada en tercera persona, busca también ser un homenaje a
ciertas personas y al país, con el interés de mostrar a los jóvenes
como son los hijos de Saturno, porque las nuevas generaciones están
ajenos a la vida política de su país de origen o del mundo.
"A lo mejor es una visión falsa de gente que está
envejeciendo, a la generación de 30 años hacia abajo no le
interesa lo que vaya a pasar en ese país, pero es un fenómeno
universal, son gente facilmente manipulable, creo que están hechos para
eso, para llevarlos a donde tú quieras llevarlos, mientras que la
generación de la novela y la mía misma no era manipulable, tenemos
una experiencia muy fuerte", comentó Navarro.
Su novela, que en algún momento dice "la verdadera biografía
de un hombre, no empieza el día de su nacimiento, aunque ello pueda tener
algún significado, sino aquel en que toma la primera decisión
capaz de afectar, de manera irreversible, su destino posterior".
Su personaje principal es resultado de la ficción, pero tiene que ver
con muchos coroneles de esa época en Cuba, es pues, un personaje atípico
que se da con frecuencia en la literatura.
"A mi me gustan mucho los personajes que representen una tipicidad, que
pueda representar a todos los demás y que sea verosímil en el
sentido de que tú creas que realmente es así", precisó.
"Yo traté de lograr muchas cosas en esta novela que es una búsqueda
de los cubanos de muchas maneras, ojalá haya logrado aunque sea una parte
de lo que me propuse, que fue mucho", comentó. |