MIAMI, Estados Unidos.- Un migrante cubano murió la tarde de ayer en un hospital panameño, según refiere el diario La Estrella de Panamá. El fallecido se llamaba Rubén Ramírez y tenía 43 años.
Unos compatriotas de Ramírez, albergados en Paso Canoas, refirieron que este presentaba problemas respiratorios. Rubén habría ingresado al Hospital Regional Rafael Hernández el 2 de enero, junto a otros cubanos que presentaron problemas de insuficiencia respiratoria.
Ramírez pertenecía a los miles de cubanos que esperan poder seguir su camino a Estados Unidos. Según refiere Martí Noticias, el certificado de defunción de Ramírez arrojaba como la causa del deceso el virus H1N1.
En paso Canoas permanecen unos 1 000 cubanos, distribuidos en diferentes albergues, a la espera de una solución a su condición migratoria. Su objetivo es llegar por vía terrestre a suelo estadounidense, y se suman a los miles que esperan en Centroamérica por una solución a la crisis migratoria creada en la región.
Según un reporte de ACAN-EFE, Ramírez estaba en un albergue temporal instalado para los cubanos en Progreso, una localidad próxima a Paso Canoas en la frontera de Panamá con Costa Rica.
Además, el Ministerio panameño de Salud confirmó este martes a través de un comunicado que Ramírez murió a causa de la gripe AH1N1, y que otros dos cubanos que le acompañaban no presentan problemas de salud pero están “en vigilancia especial”. La víctima llegó a Panamá “a través de la frontera con Colombia, luego pasó por la provincia de Darién hasta ubicarse en Progreso, Chiriquí” junto a los otros dos cubanos que ahora están “en vigilancia especial” sanitaria.
Las autoridades sanitarias “han emprendido una serie de acciones de prevención, entre ellas una jornada de vacunación, control vectorial, y se han ampliado las asistencias médicas para alrededor de 1 000 cubanos migrantes que buscan camino hacia el norte del continente”, dice ACAN-EFE. “Además se ha fortalecido la búsqueda activa de casos sospechosos, se alertaron todas las instalaciones de salud, en especial del área y regiones vecinas, se ha aplicado medidas de prevención y control vectorial en áreas afectadas, control de saneamiento de las comunidades receptoras y los albergues, y se está brindando educación sanitaria a la comunidad”, añadió la agencia de noticias, citando al Ministerio de Salud panameño.
El presidente de la Cruz Roja de Barú, Luis Antonio Rodríguez, dijo este martes a ACAN-EFE que Ramírez “ya traía de su país problemas de defensas y problemas de edad también”. El emigrante tenía dos días de haber sido trasladado de Paso Canoas al refugio en Progreso, donde al parecer se agravó su salud por una gripe, según han aseguran isleños que lo conocían. Rodríguez afirmó que a raíz de la muerte del emigrante en los albergues “sí se están previniendo los resfriados”.
También el personal de la Caja de Seguro Social y el Ministerio de Salud han reforzado las condiciones sanitarias en los hospedajes y todo lo relacionado con la manipulación de alimentos, indicó Rodríguez. El funcionario de la Cruz Roja recalcó que en todo lo que es Paso Canoas, que incluye a Progreso, hay unos 1 000 emigrantes cubanos esperando seguir viaje hacia Estados Unidos.
Los cubanos han señalado que lo sucedido es una alarma de lo que les puede ocurrir en la medida en que sigan varados en el cordón fronterizo, donde afirman viven con las condiciones mínimas necesarias y con el riesgo a epidemias y enfermedades. Adelantaron que mañana se reunirán en el gimnasio de Progreso con los medios de comunicación para decirle al Gobierno de Panamá y al resto del mundo la incertidumbre en que están, según refirieron agencias de prensa.