MADRID, España.- Los congresistas estadounidenses María Elvira Salazar, Carlos Giménez y Mark Green enviaron una carta al Dr. Jarbas Barbosa, director de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), exigiéndole explicaciones sobre el papel de la organización en las “misiones médicas cubanas” enviadas a Brasil entre 2013 y 2018.
En el documento los congresistas acusaron a Barbosa y a la OPS por obstaculizar las investigaciones, al impedir la divulgación completa de su conducta, pues no han entregado al Departamento de Estado, a los miembros del Congreso o a los abogados que representan a los médicos cubanos ningún informe sobre el tráfico de médicos cubanos.
En la misiva, reseñada por Radio Televisión Martí, los congresistas cuestionan: “¿Se están utilizando fondos de los contribuyentes estadounidenses para pagar a abogados que niegan al gobierno información básica sobre las acciones de la OPS, y para negar a los médicos su día en los tribunales?”, y destacan que la OPS, con sede en Washington, DC, “recibe cada año decenas de millones de dólares de los contribuyentes estadounidenses”.
Asimismo, recordó que la dictadura de Miguel Díaz-Canel cobra miles de millones por el trabajo de los médicos en el exterior, lo que ha sido denunciado en numerosas ocasiones como explotación laboral.
La demanda contra la OPS se inició por cuatro médicos cubanos en 2018, en Florida, y fue trasladada en 2020 a D.C.
Estos médicos, residentes en Estados Unidos, denunciaron a la OPS por su intermediación entre los Gobiernos de Cuba y Brasil en el programa Mais Médicos y por beneficiarse del trabajo forzoso de los profesionales de la salud de la Isla en Brasil.
Como parte del programa Mais Médicos, el régimen cubano acordó en 2012 enviar especialistas del sector de la Salud a Brasil. Según la demanda, los dos países utilizaron a la OPS como intermediario para evitar un acuerdo directo entre ambas partes.
Gracias a Mais Médicos, el régimen de La Habana recibió el 85 % del dinero pagado por Brasil a los médicos, que solo obtuvieron el 10 % de su salario. Mientras, el 5 % restante fue retenido por la OPS como tarifa, de acuerdo con un reporte de Reuters.