SANTIAGO, Cuba. – A más de 90 días del arresto arbitrario de José Daniel Ferrer por la dictadura cubana, la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) continúa su activismo firme y constante, tal y como se ha venido desarrollando desde hace ocho años. Con una intensa campaña nacional a favor de la liberación del líder principal de la organización y los más de 120 cubanos que cumplen prisión política en la Isla.
Para un régimen totalitario que no contempla la posibilidad de transitar hacia una democracia es “lógica” la actitud represiva y desenfrenada de pretender, a toda costa, sacar de las calles a quien es considerado por muchos el líder de la oposición en Cuba. Ferrer lidera el mayor grupo opositor de la Isla, que, pese al alza de la represión, que subió a niveles alarmantes en el año 2016, lo mantuvo como el más visible y activo en la mayoría de las provincias del país. La UNPACU cierra el año con más de 400 detenciones arbitrarias, 30 allanamientos y 45 presos políticos. Estos niveles alarmantes de represión han sido proporcionales con el activismo.
En la actualidad, la UNPACU promueve Cuba Decide, una plataforma que ha sido llevada a cada rincón de la Isla. Ahora mismo, es la iniciativa ciudadana que más preocupa al Partido Comunista de Cuba (PCC). También es la más concreta para movilizar al pueblo cubano y a la comunidad internacional en pos de alcanzar los cambios que necesita la Isla.
Del año 2018 heredamos la campaña del No a la Constitución, luego de que el régimen castrista hiciese público la realización de un “referéndum” para aprobar la nueva Constitución. Este proceso, viciado desde el principio, no ofrecía las mínimas garantías, por lo tanto, comenzamos a promover el No, seguros del rechazo popular que tienen en la actualidad las iniciativas del régimen. Percibimos una oportunidad para que el pueblo de Cuba, mediante el voto no o la no asistencia a las urnas, diera un masivo y rotundo rechazo a la dictadura.
En ese sentido, comenzamos el año 2019 con un aumento sustancial de la represión y vigilancia que puso en práctica el Ministerio del Interior (MININT) para contrarrestar de manera arbitraria nuestra campaña. Abusando del poder que ejerce sobre los medios de difusión, que se pagan con el sudor del pueblo, el Partido Comunista desarrolló una amplia campaña del Sí, explotando todo su potencial. Pero el punto clímax fueron los asaltos con robo realizados en el mes de febrero a varios de nuestros hogares, sin documentos que legalmente justificaran tal atropello. Nos ocuparon el 90 por ciento de los materiales, recursos y equipos destinados para promover la campaña, que ya de por sí era limitada debido al contexto represivo en el que se desarrolla la oposición en Cuba.
Ante tamaña arbitrariedad, proporcional fue nuestra respuesta, asumiendo una postura calificada por muchos de extrema en cuanto al sacrificio que exige. Pero una vez más la UNPACU demostró estar integrada por hombres y mujeres con vocación de patria y a una huelga de hambre de 13 días, iniciada por José Daniel Ferrer, se sumaron más de 130 activistas. Lo hicimos para que la opinión pública nacional e internacional supiera que dicho referéndum se iba a realizar en medio de una ola represiva contra aquellos ciudadanos que legítimamente promovíamos la campaña del No. A juzgar por los hechos, vencimos, cumplimos nuestros objetivos.
En la UNPACU creemos que el futuro de Cuba depende en gran medida de su juventud. En este año hemos dado continuidad a los proyectos que tienen como objetivo formar valores democráticos de libertad y respeto a los derechos humanos en este grupo etario. Fue así que creamos en el mes de abril la Academia Libertad y Democracia, mediante la cual capacitamos decenas de jóvenes, aun cuando no militen en las filas de la oposición. Asimismo, a través de la academia, desarrollamos el proyecto Alerta Joven, que tuvo como objetivo crear una red nacional encargado de registrar, documentar y visibilizar las violaciones contra los jóvenes. Luego de varios meses de recopilación de información, convocamos a un tuitazo dirigido a Miguel Díaz-Canel que tuvo un impacto gigantesco, pese a que fue meramente político. Según las estadísticas, se enviaron 8 400 tweets, participaron 900 twitteros y tuvo un alcance de 16,3 millones de personas.
En materia de denuncias, dos de las más significativa que se realizaron ante organismos internacionales y que pusieron de manifiesto las prácticas inescrupulosas del régimen cubano fueron la demanda por esclavitud ante la Corte Penal Internacional, referidas a las misiones médicas y la demanda por expatriaciones forzadas por opositores pacíficos. Ambas, realizadas en los meses mayo y junio que tuvieron una gran repercusión mediática.
Pese a los intentos del régimen cubano por desaparecer a la UNPACU, en el mes de agosto, la organización celebró sus ocho años de fundada. Para angustia del régimen, los mensajes de felicitaciones, ánimo y solidaridad no se hicieron esperar por parte de numerosas personalidades, instituciones, influencers, artistas y periodistas. Destacan los líderes políticos Luis Almagro, secretario general de la OEA; Marco Rubio, senador estadounidense; artistas cubanos como Roberto San Martín y Judith González, y muchos otros más.
Entre asaltos, detenciones y encarcelamientos, el régimen de La Habana pretendía vender una vez más y tranquilamente a la Unión Europea una falsa apertura en términos de derechos humanos. Para un día antes del encuentro entre ambas partes, la UNPACU y Cuba Decide lanzaron una convocatoria para salir el 8 de septiembre a lugares públicos con un girasol, y exigir el cese de la represión contra la sociedad civil, cuentapropistas y pueblo en general.
La marcha de los girasoles terminó con al menos 200 activistas detenidos en todo el país, pero fue una de las heridas más profundas que la oposición le ha hecho en los últimos años a la dictadura, que tuvo que movilizar a su ejército para evitar que ciudadanos cubanos saliesen pacíficamente a protestar a las calles armados únicamente con un girasol en la mano.
Sin dudas, hemos dados grandes pasos en este 2019, pasos que conducen a un cambio de sistema. Precisamente Pasos de Cambio se llamó un evento que tuvo lugar en octubre, en la Torre de la Libertad en Miami, que marcó un momento de unidad. UNPACU junto a Cuba Decide fue parte del comité organizador. Aunque a decenas de activistas les impidieron salir de Cuba para asistir, más de un centenar de organizaciones opositoras a la dictadura, de dentro y de la diáspora, ratificaron el Acuerdo por la Democracia.
Nuestro trabajo es fruto de una combinación de fuerza de simpatizantes, activistas, coordinadores, todos promotores de Cuba Decide. Y de colaboración de los nobles cubanos que desde la diáspora nos apoyan, a título personal o a través de instituciones como la Fundación Nacional Cubano Americana.
Con el encarcelamiento de José Daniel Ferrer, el régimen cubano da por sentado que puso fin a la UNPACU y eso ha sido un gravísimo error de cálculo, porque no somos uno, ni dos, ni tres. Somos solo una parte de esa gran masa que ha decidido no callar más y decir basta.
A la oposición, debemos tener la capacidad de ver oportunidades en los momentos más oscuros. Nuestra misión es canalizar ese descontento popular, guiar, educar y transmitir fe. Es hora de rectificar errores, trazar nuevas estrategias, de cerrar filas y unirnos desde la diversidad. A los nuevos dirigentes, no existe argumento moral que impida a un pueblo decidir su futuro. Por primera vez en seis décadas, hagan algo verdaderamente decoroso, y pónganse del lado correcto de la historia, del lado del pueblo cubano.
Recibe la información de Cubanet en tu teléfono a través de Telegram o WhatsApp. Envíanos un mensaje con la palabra “CUBA” al teléfono +1 (786) 498 0236 y suscríbete a nuestro Boletín dando click aquí.