LA HABANA, Cuba, mayo, 173.203.82.38 -El 7 de mayo, el periódico Granma, con un gran titular en su primera página, informaba que el presidente Raúl Castro recibió a Fernando Pimentel, ministro de Desarrollo, Industria y Comercio de la República Federativa de Brasil. El encuentro sirvió para pasar revista a las excelentes relaciones bilaterales, y ambos políticos ratificaron la voluntad de continuar fortaleciéndolas.
Pero en las páginas interiores del diario no hubo ninguna información sobre las actividades desplegadas por Pimentel. Tampoco se dijo con qué funcionario del gobierno cubano sostuvo conversaciones y el día que regresaría a su país. Como es costumbre de la prensa oficial cubana, la visita estuvo envuelta en una espesa bruma.
El vicepresidente Miguel Díaz-Canel, en un encuentro, efectuado el 5 de mayo, con profesionales de la educación, para preparar el nuevo curso escolar, expresó que como las noticias que circulan por Internet llegan al gran público, entonces lo peor es silenciarlas. El también responsable de la política ideológica del Partido Comunista, señaló que prohibir la información es algo que no tiene sentido.
Habría que preguntarle al director del periódico Granma quién le prohibió que informara que la visita de trabajo de Pimentel a La Habana fue para firmar memorando de entendimiento con el ministro cubano de Comercio Exterior e Inversión Extranjera, Rodrigo Malmierca, consistente en el otorgamiento de un crédito de 176 millones de dólares para la modernización de cinco aeropuertos cubanos, los de La Habana, Santa Clara, Holguín, Cayo Coco y Cayo Largo del Sur.
Sobre este asunto del crédito destinado a los aeropuertos, el Granma sacó una pequeña nota, el 8 de mayo, referida al financiamiento del proyecto, pero omitió decir el monto de dinero concedido por Brasilia, así como las instalaciones aeroportuarias que serán objeto de modernización y ampliación.
Curiosamente, la visita de Pimentel a Cuba coincidió con la del canciller cubano, Bruno Rodríguez Parrilla, a Brasilia, donde sostuvo encuentros con la presidenta Dilma Rousseff y su homólogo Antonio Patriota.
Sobre el viaje de Rodríguez Parrilla a Brasil, el periódico Granma publicó una escueta información, el 7 de mayo, en la que resalta los encuentros del dirigente cubano con la más altas autoridades brasileñas, pero particularmente su reunión con el canciller suramericano, para refrendar las sólidas relaciones que hoy existen entre La Habana y Brasilia.
Pero Granma ocultó que el principal objetivo del viaje del canciller cubano fue concretar con su homólogo la posible contratación de unos 6.000 médicos cubanos para que oficien en áreas que carecen de atención sanitaria en Brasil. En este acuerdo estaría involucrada la Organización Panamericana de la Salud (OPS).(Luego se supo que Brasil prefiere contratar médicos españoles y portugueses antes que los cubanos).
Como se puede apreciar, la prensa oficial, de manera sistemática, le oculta al pueblo cubano determinados acontecimientos. Solo tienen derecho a esa información una reducida cantidad de funcionarios.