LA HABANA, Cuba, noviembre, 173.203.82.38 -El XIV Festival Internacional de Teatro de La Habana, inaugurado el viernes 28 de octubre en el Pabellón Cuba y clausurado el domingo 6 de noviembre en la sala García Lorca del Gran Teatro de La Habana, se caracterizó por la diversidad de géneros escénicos: danza, música, mimos, títeres, circo, comedia, drama y monólogo, lo cual involucró a decenas de compañías de la isla y casi una veintena de invitados de América y Europa.
Bajo el slogan “un arte de resistencia y un teatro urgente”, el Consejo Nacional de las Artes Escénicas del Ministerio de Cultura atrajo al público hacia las propuestas del Gran Teatro de La Habana y las salas Mella, Trianón, Huber de Blanck, Llauradó, Buendía, Tito Junco, El Ciervo Encantado, Casa Gaia y espacios abiertos como la Plaza de Armas, los Almacenes San José, la Carpa Trompoloco y las subsedes provinciales de Matanzas, Cienfuegos y Villa Clara.
Entre los invitados foráneos descollaron Argentina con Teatro Carretero, Tres gatos locos, la compañía El Trompo y Delta-Trabajo Teatral; España con la Compañía de Antonio Gades, Abrego Teatro, Arte Promociones y Xel Arte; más los Estados Unidos con Los embajadores de Broadway en concierto, de Nederlander Wodlwide Entertaiment; además de Fundarte y Peter Golgfarb; así como representaciones de Brasil, la Orquesta de cámara china, Congreso Producciones de Chile, Chipre, Ecuador, la Compañía de teatro musical de Francia, el Theatre du Centaure de Finlandia, Borba Teatro de México, Jo Stremgrem de Noruega y elencos de Italia, Reino Unido, Turquía y Venezuela.
Por los anfitriones estuvo bien encarnado el teatro infantil, tan didáctico como ideologizante, a través del Guiñol Nacional, Papalote, Pálpito, Proa, Teatro de La Villa, Las Estaciones, los títeres El Arca, El Retablo y Guiñol de Guantánamo, y La Edad de Oro; cuyas reposiciones colmaron la programación de sedes y espacios públicos en diversos horarios.
De mayor expectativa resultaron las entregas del Buendía –Charenton-, en cuya sede fueron exhibidas Teatro di comedia, coproducida por Argentina, España e Italia; Metamorfosis de Arlequín, y Ayer dejé de matarme gracias a ti, de Heiner Muller por el Teatro de la Luna, que montó en el Mella su alegórica versión de El dragón de oro, de Roland Schimmelpfennig. Al Mella subieron también Paz, del Teatro estatal de Turquía; The last arte-Thropos, del Rectus Centrum de Chipre, y Donde no hay agravios no hay celos, del hispano Arte Promociones.
Tal vez las obras más solicitadas por el público subieron al tablado de la sala García Lorca del G. T. H., donde impactaron los cantantes americanos que interpretaron fragmentos de musicales de Broadway; coronado el domingo 6 por la Compañía Antonio Gades de España, fascinante en su montajes de Bodas de sangre y Suite flamenca.
El Café Brecht repuso Ay mi amor, del Teatro El Público, y Consumiéndose, de Charlotte Simonot, de Francia; así como El chupito de poesía, por Xel Arte de España; Oratorio por un país en sombras, del Equipo Delta Teatral de Argentina, y Esperando a Godot, a cargo de Pequeño Teatro de La Habana.
La Casona de Línea impresionó con Punto. Punto. Punto, de Habana Nostalgia; La razón blindada, de Borba Teatro de México, y Saltusmia (Coincidencias), del colectivo dramático de Finlandia; más Una vida en el teatro, por Peter Goldfarb (Estados Unidos), y Baby Universe, de A. Puppet Odyssey, de Wakka Wakka, Noruega. Mientras El Sótano exhibió El baile, de Teatro Utopía; El Conde Claus, del elenco chileno; la versión de Boda de sangre de Abrego Teatro de España, que trajo a su vez Cientos de pájaros te impiden andar, y Desnuda, del Teatro Aire Frío.
El Hubert de Blanck reestrenó Arizona; Las Pericas, del ecuatoriano Teatro Ensayo Gestus; Dithe Society, del noruego Jo Stremgrem Kompany, y El trompo metálico, de la compañía argentina El trompo. Los argentinos del Teatro Carretero representaron De vuelta, en el Complejo cultural Brecht; mientras Tres gatos locos escenificó en la Plaza de Armas Libres lombrices y Soñando historias. El brasilero Os Satyros actuó en la Tito Junco con Cosmogonía, experimento número. La obra inglesa Una noche con Harold Pinter, de Andy de la Tour, alternó en el Museo de Bellas Artes con Ensayo para siete, de Aldaba Teatro, y la Orquesta de Cámara China.
La diversidad de géneros y propuestas, la simplificación escenográfica, el sentido experimental de algunas agrupaciones y otros elementos de la magia teatral impactaron a los espectadores en las salas capitalinas durante la 14 edición del Festival Internacional de Teatro de La Habana.