LA HABANA, Cuba, octubre, 173.203.82.38 -Una amiga de Sevilla que alterna la atención a la madre enferma con las búsquedas en Internet, me adjunta en un correo algunos datos e imágenes sobre la mujer del general Raúl Castro Ruz, sucesor del hermano en el trono de Cuba. No visualizo el video pero retengo el nombre de Talía González, la elegida del mandatario, aquella locutora cuarentona de los maratónicos actos sabatinos de “reafirmación patriótica”. Si fuera cierto les deseo que sean felices, más no me interesa el tema.
Admiro mucho a esta amiga pues es solidaria con varias familias cubanas sumergidas en la miseria, a las cuales les envía ayuda de su bolsillo y lo que recauda entre las damas que acuden a su gimnasio. Como ella sabe que no indago en las vísceras del castrismo, si no en los entresijos de la cultura nacional, le doy las gracias y le pregunto por la Madre Patria. En otro mensaje me informa acerca de la crisis y “los indignados de España, pero adjunta un manojo de chistes cubanos.
Algunos chistes son frescos, otros tan añejos como nuestros caciques. En ellos, el jubilado Fidel Castro y el irreverente Pepito siguen en el protagonismo del imaginario popular. En las bromas anónimas ambos interactúan entre la frivolidad y la agudeza. La realidad cubana deviene centro de disparates y alusiones filosóficas de corte existencial.
Los turistas, los letreros, los entierros, el chino, el socialismo, las semejanzas y Hugo Chávez rivalizan en los chistes con el Comandante Castro y el insolente Pepito, más evocados en el exilio que dentro de la isla, donde apenas escuchamos sus peripecias.
Si de chistes se trata, comparto con los lectores la muestra de masoquismo popular enviada por la amiga andaluza, tan conectada a Cubalandia como los nostálgicos de Miami, Madrid o México.
Castro, Pepito, el chino y Hugo Chávez:
“En el Cementerio Colón, durante el entierro de Celia Sánchez, el Comandante murmura: ¡Oh, Celia, mi Celia! Un chino que escucha le dice: ¿Mi Celia? ¡Micelia, hambre y dictadura!”
“El inspector de escuela le pregunta a Pepito: -¿Quién es tu madre?
-La Patria, inspector.
-Y ¿tu padre?
-Fidel, inspector.
-Y tú, ¿qué quieres ser Pepito?
-¡Yo, huérfano, inspector!”
Castro llama a Hugo Chávez y le pregunta: “¿Qué estás haciendo ahora compañero Presidente?
-Yo, estoy bolivarizando al pueblo venezolano. Y tú, ¿qué estás haciendo?
-Yo aquí, Martí-rizando al pueblo cubano”.
La maestra le pregunta a Pepito: -“¿Qué es el capitalismo?
-Es un basurero lleno de carros, juguetes y comida.
-Muy bien, Pepito, ¿y el comunismo?
-El mismo basurero, pero vacío…”
Turistas y semejanzas:
Un turista canadiense pregunta en una tienda de música de La Habana:
-“¿Tienen la canción Morir de amor, por los Hermanos Fabrisa, en 45 revoluciones?
-No, pero tenemos Morir de hambre, por los hermanos Castro, en una sola revolución”.
Un chistoso pregunta a un ingenuo: “¿En qué se parecen el Vaticano y la Reforma agraria de Cuba? Ante el silencio del otro, le dice: En que durante 50 años solo producimos cuatro papas”.
Un sacerdote sus feligreses: “Hijos míos, estoy por creer que Adán y Eva eran cubanos, pues no tenían ropa, andaban descalzos, no los dejaban comer ni manzanas, y les insistían que estaban en el paraíso”.