RAMALA, Cisjordania, 5 de agosto (Agencias, 173.203.82.38) – La Organización para la Liberación de Palestina (OLP) canceló una reunión de un comité del Movimiento de Países No Alineados que por primera vez iba a tener lugar el domingo en Ramala, después de que Israel impidiera la entrada a los representantes de Indonesia, Cuba, Malasia y Bangladesh.
“La reunión ha sido cancelada en coordinación con todos los miembros del Comité Palestina, que consideraron improcedente llegar a Ramala y celebrar la reunión sin ellos”, dijo a la agencia Efe Xavier Abu Eid, uno de los portavoces de OLP.
Cuba, que rompió relaciones con Israel en 1967, iba a estar representaba por su embajador en la ONU; Malasia e Indonesia por sus respectivos ministros de Exteriores, y Bangladesh por su viceministro de Exterior.
Los representantes del Comité se encontraban en Ammán, capital de Jordania, a la espera de ser trasladados a Ramala en helicóptero para no tener que pasar por los pasos fronterizos terrestres controlados por Israel, que ocupa todo el territorio de Cisjordania y, por tanto, sus fronteras con el vecino reino hachemí.
“Hemos decidido que sólo serán autorizados los representantes cuyos países tienen relación diplomática con Israel”, refirió a Efe el portavoz del Ministerio de Exteriores, Yigal Palmor, al explicar una medida que afectaba a cuatro de los trece países miembro del comité: Indonesia, Bangladesh, Malasia y Cuba, indicó Efe.
Los otros participantes son Egipto, India, Colombia, Sudáfrica, Senegal, Zambia, Zimbabue, Jordania y Argelia, país este último que no tiene relaciones con Israel, pero que no iba a estar presente en la reunión.
Según Abu Eid, el grupo tenía previsto viajar a Ramala en un helicóptero jordano, pero cuando vio que cuatro de los representantes no podrían hacerlo decidió quedarse en Ammán, donde ofrecerán una rueda de prensa en señal de protesta.
En una nota de prensa, Hanan Ashrawi, miembro del Comité Ejecutivo de la OLP, condenó enérgicamente la prohibición israelí, que describió como un “evidente y crudo ejercicio de fuerza” y “una forma de asedio político”.