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ARTEMISA, Cuba.- Es domingo y no hay muchas opciones de entretenimiento ni diversión, pero para estos amantes de las rancheras y los caballos en Cuba no son para nada aburridos. La cita es en una cafetería particular situada en la Autopista de San Antonio muy cerca de la UCI (Universidad de Ciencias Informáticas). Después de las 4:00 pm comienzan a llegar muchas personas al lugar. Lo mismo a caballo, en carretas o incluso en camiones, viajan desde otros municipios y el objetivo es el mismo para todos: divertirse, beber y apostar a la “araña” (carreta tirada a caballo) más veloz en las carreras.
Al llegar allí el pasado domingo sobre las 4:30 p.m. ya se podía observar un gran número de caballos y carretas. Las rancheras mexicanas se escuchaban a casi un kilómetro de distancia. El tipo de carretas para caballos utilizadas son llamadas “arañas”, y son acondicionadas con el objetivo de hacerlas más livianas y veloces. También en algunos casos se le añaden baterías para alimentar equipos de audio y grandes bocinas para escuchar música. Las carreras comienzan sobre las 6:00 p.m. y existen varias modalidades.
En el lugar se encontraba Bárbaro Harriera, un corredor de “arañas” de caballo que reside en el municipio de San Antonio. Explica lo que ahí acontece: “Hacemos esto por diversión. Aquí no hay más opciones los domingos, así que nos reunimos y entre todos compramos ron o cerveza y pasamos un buen rato. No son sólo las apuestas en las carreras, que pueden ser en tramos de un kilómetro en la autopista o de largas distancias como desde Pinar del Río hasta La Habana. También en estas reuniones se cierran negocios y se intercambian animales y ‘arañas’”.
Las carreras son el plato fuerte del evento. Las apuestas comienzan y se planifican incluso semanas antes. Las arañas que compiten son revisadas minuciosamente antes de cada carrera.
“Revisamos los rodamientos, que tengan buena cantidad de aire las gomas, los arreos de los caballos que estén bien amarrados y seguros. Han ocurrido varios accidentes, aunque ninguno ha sido fatal. Lo principal aparte del jinete es el caballo. Una araña que esté muy buena, sin un buen caballo halando no gana”, explica Manuel Enrique Carvajal, conocido como “El Yuma” y jinete de una “araña” que el mismo bautizó como “El pájaro negro”.
En el lugar se encontraban también varios estudiantes de la UCI observando las carreras. Mario Valles un joven estudiante de cuarto año de informática, confiesa: “No me pierdo esto ni un solo domingo, la diversión es garantizada. Pero no entro en las apuestas porque he visto muchas broncas por problemas de dinero. Soy de Santiago de Cuba y los fines de semana no hay mucho que hacer dentro de la UCI. Por eso nos reunimos varios estudiantes y caminamos hasta aquí. Esto se parece al coliseo romano.”
Muy cerca de la llamada “Autopista de San Antonio” se encuentra un punto de control de la PNR (Policía Nacional Revolucionaria). Varias veces, tanto corredores de “arañas” como espectadores han tenido que salir corriendo porque la policía aparece de repente.
“Eso nos divierte mucho. Cuando llega la policía lo que hacemos es halar para el monte. Ellos andan en patrullas y nosotros a caballo. Nunca han detenido a nadie. Ellos también se divierten tratando de cogernos y nos gritan que saben quiénes somos, pero en el fondo hasta ellos la pasan bien. Muchos, en sus días de descanso, han venido vestidos de civil para apostar en las carreras también”, cuenta Dayron Menéndez, un corredor de “arañas” que se encontraba en el lugar.
La reunión que suele acompañar el evento se efectúa en una cafetería particular que se encuentra al lado mismo de la Autopista. Se llama “La Comida Criolla”, y allí trabaja Coralia Mesa como dependiente en el lugar.
Mesa prefiere que sus turnos de trabajo sean los domingos. “Tenemos mucha más venta debido a las carreras de ‘arañas’, los ‘caballiteros’ se reúnen aquí y consumen bastante. También me dejan propina; por eso prefiero trabajar los domingos. Es el día que más me divierto de la semana porque aquí dentro de la cafetería se pueden escuchar las discusiones de cuál ‘araña’ es la más veloz y quién apuesta a Fulano o a Mengano”.
Las opciones recreativas a precios razonables escasean en la isla. Los cubanos jóvenes –y los no tan jóvenes– se han visto obligados a crear iniciativas para divertirse y dejar un poco los problemas detrás. Las carreras ilegales de motos, autos, caballos y “arañas” son, en la Cuba de hoy, una d las opciones preferidas por la mayoría de los jóvenes.